Dura respuesta de Bolivia a un diputado de Bolsonaro
El presidente de Bolivia, Evo Morales, y dirigentes políticos oficialistas y opositores rechazaron las expresiones del diputado brasileño Rodrigo Amorim, perteneciente al partido del presidente Jair Bolsonaro, que manifestó que «a quien le guste el indio, que vaya a Bolivia».
Amorin se refirió a la Aldea Maracaná donde habitan al menos 25 comunidades indígenas como una «basura urbana» que es necesario limpiar.
Y agregó: «como carioca, me causa indignación ver aquello de la manera que está hoy. A quien le guste el indio, que vaya a Bolivia, que, además de ser comunista, sigue presidida por un indio».
Frente a esto, Evo Morales escribió en Titter: «Lamentamos el resurgimiento de ideología de supremacía racista (KKK), como réplica de xenofobia de Gobierno de Estados Unidos. Ante intolerancia y discriminación, los pueblos indígenas promovemos respeto e integración».
El expresidente boliviano y candidato opositor Carlos Mesa, señaló: «Indignante declaración de diputado brasileño ofende a Bolivia y no expresa hermandad de nuestros pueblos (…) «las diferencias ideológicas entre Gobiernos no justifican tal afirmación sobre nuestras identidades y nuestra fortaleza como nación».
El también opositor senador boliviano Arturo Murillo le reclamó a Rodrigo Amorim una disculpa porque «somos orgullosos de ser mestizos, indios y campesinos, condenamos dictadores, narcotraficantes y corruptos».
La ministra de Comunicación, Gisela López, afirmó que «el diputado brasileño Gustavo Amorim desprecia con ignorancia supina a nuestros antepasados, los verdaderos dueños de la Patria Grande, con palabras que demuestran ceguera y pobreza espiritual».
El embajador de Bolivia ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Sacha Llorenti, también escribió en Twitter: «Al que le guste la justicia social que vaya a Bolivia. No son bienvenidos el racismo ni la discriminación».