Bolivia al tope del crecimiento económico en Suramérica
El producto interno bruto (PIB) de Bolivia creció 4,3% el año pasado según datos oficiales y privados reafirmados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El país mantiene un crecimiento constante de su economía aún en un contexto internacional adverso.
Una de las particularidades de las mediciones de 2016, cuyos datos oficiales fueron difundidos este jueves, es que la principal actividad económica, gas y petróleo, decreció en el mismo período 4,4%.
La caída en la extracción de gas natural y petróleo, que da a Bolivia sus mayores ingresos fiscales, muestra un fortalecimiento de otras variables económicas como construcción, industria manufacturera, actividad financiera y transporte.
Según el INE, las actividades económicas registraron en 2016 las siguientes variaciones positivas: Establecimientos Financieros, Seguros, Bienes Inmuebles y Servicios Prestados a las Empresas 7,8%; Construcción 7,8% e Industria Manufacturera 6,2%.
Transporte y Almacenamiento 6,0%; Electricidad, Gas y Agua 5,3%; Minerales Metálicos y No Metálicos 4,7%; Comercio 4,4%; Comunicaciones 4,3%; Servicios de la Administración Pública 4,3%; Otros Servicios 4,3% y; Agricultura, Pecuaria, Silvicultura, Caza y Pesca 3,1%.
En 2015 el crecimiento económico registrado fue de 4,9% y el promedio del último quinquenio estuvo por encima del 5%.
El Banco Central de Bolivia (BCB) informó que en 2016 se registró una “desaceleración económica mundial y una contracción en América del Sur por segundo año consecutivo” y que “el entorno externo fue más adverso que el previsto”.
La entidad explicó que las autoridades bolivianas han generado “mayores impulsos monetarios y fiscales para sostener el crecimiento de la actividad y preservar las mejoras de los indicadores sociales”.
El Banco Central indicó en un informe difundido a comienzos de abril que la economía crecerá estimativamente este año un 4,7% y la inflación se situará en torno al 5 %.
El mismo documento del BCB revela que las expectativas suponen que Bolivia logrará el crecimiento más alto en Suramérica y una de las inflaciones más bajas y estables de la región.