China y Rusia piden a Norcorea suspender ensayos con misiles
Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y China, Xi Jinping, pidieron a Corea del Norte postergar sus ensayos con misiles y armas nucleares para dar tiempo a un trabajo común que asumirían ambos mandatarios para descomprimir la tensión en la península de Corea.
Tras reunirse en Moscú ambos mandatarios firmaron un comunicado conjunto en el que piden al gobierno norcoreano que «de manera voluntaria declare una moratoria de las pruebas con armamento nuclear y los ensayos de misiles balísticos»
Pidieron también a Estados Unidos y a Corea del Sur, principales enemigos del gobierno de Pyongyang, «a que se abstengan de realizar maniobras militares conjuntas a gran escala» en la región.
Ambos mandatarios reiteraron en que el despliegue del escudo antimisiles estadounidense THAAD en el sureste de Asia «representa un grave perjuicio para los intereses de seguridad estratégica de los países de la región, incluidos Rusia y China».
Alertaron que «la escalada de la tensión político-militar en esa región, que está condenada a provocar un conflicto militar, exige de la comunidad internacional la adopción de medidas colectivas para el arreglo pacífico del conflicto a través del diálogo».
Putin y Xi Jinping cuestionaron el anuncio de Pyongyang sobre el lanzamiento de su primer misil balístico intercontinental que alcanzó una altura máxima de 2.802 kilómetros y recorrió 933 kilómetros.
Pidieron a Corea del Norte que cumpla estrictamente las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que impiden actividades con armas nucleares o de largo alcance.
Tras hacer público el comunicado, Putin explicó junto a China acordaron impulsar «una iniciativa común», por etapas, y «congelar paralelamente las actividades de misiles y nucleares de Corea del Norte y las maniobras militares a gran escala de Estados Unidos y Corea del Sur».
El presidente ruso insistió en que «la solución del problema en la península coreana con el fin de garantizar una paz y estabilidad sólidas en el noreste de Asia figura entre las prioridades de la política exterior común».
Ambos aceptaron que «las preocupaciones de Corea del Norte deben ser respetadas» y pidieron que «otros países deben realizar esfuerzos para la reanudación de las negociaciones» sobre el programa nuclear coreano.
Rusia y China aclararon que están «en contra de la presencia de fuerzas militares ajenas al noreste de Asia y su ampliación con la excusa de la lucha contra el programa nuclear y de misiles de Corea del Norte».
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