Entrevista a Isaías Rodríguez: “La ANC debió empezar por el tema económico»
30 agosto, 2017
category: FORO DEBATE
Por Clodovaldo Hernández
En entrevista exclusiva con Supuesto Negado, el segundo vicepresidente de la Constituyente dijo que en el Ministerio Público, Sodoma y Gomorra quedaron pequeñas.
*¿Puede la Constituyente domar la economía incontrolable? ¿Están preparados técnica y profesionalmente para ello?*
–El problema de la crisis económica actual de Venezuela es muy complejo. Vienen arrastrándose situaciones que debieron ser analizadas y abordadas con respuestas gubernamentales con anterioridad a la ANC: Dólar Today, corralito bancario, banca paralela, sobreprecios, falta de seguimiento a los beneficiarios de los dólares preferenciales, convenio bancario con Colombia, eventuales hechos de corrupción por parte de funcionarios sin denuncias ni investigaciones abiertas. Cualquier respuesta debe ir al fondo, nada se gana con multar bodegas. Esta culebra hay que matarla por la cabeza aunque tenga muchas cabezas. La experticia y la técnica, la profesionalizada investigación, la asesoría objetiva y desligada de intereses económicos, políticos y culturales son absolutamente necesarios. Hay constituyentes preparados para enfrentar estos intereses y con el coraje necesario para asumir la responsabilidad de destapar esta caja de Pandora. No soy experto en el tema, olfateo irregularidades e intuyo que hay demasiados intereses económicos que hay que enfrentar sin prejuicios y sin ánimo de crear escándalos. A partir del 28 de agosto empezarán a darse a conocer las primeras conclusiones. En mi opinión la ANC debió comenzar por este tema y no por el político. Era importante resolver lo del Ministerio Público, pero no para dejar que se fuera la ex fiscal. Es una mala costumbre del país creer que “lo mejor es que se vayan”. La impunidad le hace mucho daño al país.
*¿Qué es lo primero que hay que hacer en la Fiscalía para combatir la corrupción y la impunidad?*
–Cuando fui fiscal general de la República le propuse al presidente Chávez tres cosas: 1) adscribir el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas al Ministerio Público, y no al Ministerio del Interior (viví la experiencia de un CICPC que se dirigía políticamente y no técnicamente); 2) eliminar las policías de las gobernaciones y de las alcaldías y someter la nueva policía (nacional como los Carabineros italianos) a una Escuela de Formación y a una carrera que les de estabilidad e institucionalidad; 3) darle al Ministerio Público los recursos suficientes para formar técnicamente a los fiscales (hay menos fiscales que jueces) y otorgarles mejores salarios. Hoy la situación es más crítica, la corrupción se ha instalado hasta en los mensajeros, con sus excepciones, las coimas son una red peor que la red de extorsión que había en el Ministerio Público. Esta era para los delitos económicos de las grandes empresas o los delincuentes de cuello blanco con traje de levita. Hay una para todos los demás delitos especialmente para los de drogas. No hay escrúpulo ni vergüenza para hacer negocios con la función pública judicial. La ética pública está casi desaparecida y el compromiso institucional no existe. El desgaste moral es un despeñadero con ejemplos como el diputado Ferrer, su compañera y todos a los que dejaron ir para EE.UU. y desde allí siguen delinquiendo con el apoyo de las agencias de inteligencia imperiales. Todas las soluciones son a largo plazo. La reestructuración de todo el país público es indispensable. Debe desaparecer el padrinazgo, el amiguismo, la cuota familiar, las recomendaciones, los nexos amorosos de uno y otro sexo que contaminan la administración pública de vanidades e incompetencia, ineficacia y burocratismo.
*¿Le asombró el caso que involucra a la exfiscal y a su esposo en una red de corrupción?*
*–Nadie se asombra de nada en este país. Era un rumor a voz pópuli lo de ANROS (Asociación Nacional de Redes y Organizaciones Sociales, dirigida por Germán Ferrer, cónyuge de Luisa Ortega Díaz) en el Ministerio Público. La compañía de seguros de Germán Ferrer sustituyó el aseguramiento del MP desde el mismo momento en que la fiscal tomó posesión. En mi gestión esa decisión se tomaba sin que el fiscal tomara parte de ella. Se escogía por un procedimiento transparente que la Contraloría felicitó en su oportunidad. Así se seleccionó a la compañía aseguradora y se le entregaron las actas a Luisa Ortega. Ella no solo eliminó a esa compañía, sino que entregó a la empresa de su compañero el contrato y los pagos correspondiente al primer semestre. Luego por no se cuáles razones se desprendió del contrato. La aseguradora seleccionada en mi gestión desapareció y también los pagos del primer semestre. Lo del avión, la casa donde residían, el cambio sobre una nueva óptica para con los EE.UU. (para muchos más económico que político) son demostraciones evidentes de la corrupción. Si a ello agregamos las disputas que corrieron a través de las redes con filmaciones y grabaciones de los hechos de corrupción interna, donde los fiscales peleaban entre sí y con algunos miembros del despacho de la fiscal general por el botín ilegítimo a repartirse, hay que decir que no ha quedado hueso sano en esa instancia y que las excepciones que pueden y deben haber todavía no salen del asombro y del susto de lo que vivieron en ese mundo servil, descalificado y denigrante en el que la exfiscal sumió al Ministerio Público. Sodoma y Gomorra se quedan pequeñas ante la desmoralización que aún queda en el MP. Aquellas quedaron bajo las aguas del mar Muerto, pero estas flotan en las aguas de un mar vivo.*
*¿No le parece que desmoraliza a la gente esa facilidad con qué se han fugado personas señaladas por la justicia, como la exfiscal?*
–Ya lo dije antes cuando hice referencia a que a algunos “dirigentes importantes” les pareció maravilloso que se hubiesen fugado. Posiblemente temían el ventilador. La exfiscal lo ha prendido, pero no tiene la misma fuerza de declararlo en un acta judicial. Sus denuncias tienen connotación política, compromisos con factores externos de poder y revanchas. Los dichos bajo presión habrían estado más ajustados a la verdad. Hubiesen sido en algunos casos, una vez demostrados judicialmente, elementos para una reducción de la pena. Aquí se fugaron (Pedro) Carmona Estanga, (Rafael) Isea, el ex presidente de la Sala Penal (Eladio Aponte), los banqueros, (Eligio) Cedeño y (Nelson) Mezerhane, los escoltas del presidente Chávez, exministros y hasta la secretaria del Consejo Moral Republicano y los alcaldes condenados a 15 meses por la Sala Constitucional, y todo el que tenga un amigo en el gobierno. Eso desmoraliza a cualquiera. La cárcel en Venezuela es para los que no tienen dinero ni cuello blanco ni amigos poderosos. La impunidad ha sido el castigo que Dios le impuso a Venezuela para compensar las inmensas riquezas que le dio. Pareciera que la Revolución pasó de largo cuando vio el poder judicial. A lo mejor le tuvo miedo o cambió de nombre cuando se le acercó. En lo personal me afecta emocionalmente cuando hay gente que con los pelos del burro en la mano me pregunta si soy revolucionario o “robolucionario”.
*¿Cómo ve el año 2018: como hito, transición, ruptura o como un año más? ¿Cómo se imagina las presidenciales?*
–En el mundo, en todo el planeta, es difícil hoy hacer predicciones políticas. Trump da trumpadas dentro y fuera de los EE.UU. Ahora sabemos lo que puede hacer un empresario cuando administra el Estado como si fuese una compañía anónima. Lo de anónima no es simplemente una expresión mercantil. Preferí el símil con la C. A. y no con la sociedad responsabilidad limitada, porque en estos casos no hay límite. No me imaginé que viviría para ver el declive de un imperio, pero lo que menos entró en mi pensamiento es que esa caída fuese tan desastrosa, tan torpe y tan inmoral. Hasta los contrabandistas tienen códigos que ellos llaman de ética. Los presos también los tienen, mientras que la decadencia no tiene ni pálpitos de moral. Se desmoronan y el desmoronamiento más que inmoral es “amoral”. Voy a la respuesta. No debo eludirla: habrá que llegar al 2018 para opinar sobre el 2018. Si se quiere ver el vaso medio lleno diríamos que habrá elecciones y que si la oposición no está unida (me refiero a una unidad de verdad, no como la que han aparentado) pudieran perder las elecciones. Creo que el único candidato que hay para estas elecciones (con todo y lo que han hecho para descalificarlo) es Nicolás Maduro. La oposición no tiene a nadie. Tal vez por eso juegan al golpe de Estado o a la invasión extranjera. Insisto en que, mirando el vaso medio lleno, el 2018 será un año más, aunque en Venezuela ningún año se parece a otro. Todos son distintos. Es más, los días son distintos y todo es diferente cada hora, cada minuto. Cierto es que el tiempo se mueve con una rapidez tal que no sirven las edades para medirlo, pero es que en Venezuela ese tiempo muere, resucita, se vuelve a morir y renace de las cenizas como el Ave Fénix. Aquí el tiempo no se pone viejo, se pone “nuevo” y hace que se pierda la sabiduría de aquel adagio de que “más sabe el diablo por viejo que por diablo”. En Venezuela se sabe más por nuevo. Tal vez por ello el presidente Chávez utilizó una expresión que jamás he podido comprender: “mi nuevo mejor amigo”.