Estados Unidos realiza maniobras militares frente a Venezuela
Ignacio Díaz – América XXI
En medio de la ofensiva sostenida desde Washington contra el gobierno de Venezuela, el Comando Sur estadounidense puso en marcha una serie de ejercicios militares en el mar Caribe que culminarán el 17 de junio.
Inaugurada el martes en Barbados, muy cerca de las costas venezolanas, la actividad militar cuenta con la participación de las fuerzas armadas estadounidenses y de otros 18 países. Formalmente fue convocada para afrontar cuestiones de “seguridad marítima” y “respuesta a desastres”, pero se produce en el marco de una profunda intervención estadounidense en los asuntos internos de Venezuela.
El despliegue militar se hará en dos fases. La que comenzó este martes y culmina el 12 de junio se lleva a cabo en el mar de Barbados, y del 13 al 17 de junio tendrá lugar la segunda etapa en Trinidad y Tobago. La elección de ambas islas y sus plataformas marítimas para realizar estos ejercicios no parece casual: Barbados y especialmente Trinidad y Tobago están muy cerca de Venezuela.
Según el comunicado oficial del Comando Sur, de las maniobras anuales conjuntas participarán 2.500 militares de Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, República Dominicana, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, San Cristóbal y Nieves, Surinam, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago, Canadá, Francia, México y Reino Unido, además de las fuerzas estadounidenses.
El jefe del Comando declaró que “el ejercicio ayuda a asegurar una alianza sin fisuras y, mediante el entrenamiento cruzado con miembros de servicio de todo el mundo, garantiza una mejor respuesta a los desastres naturales y a las amenazas terrestres y marítimas, incluido el tráfico ilícito en una región crítica”. En abril había presentado un informe al Senado estadounidense en el que advertía que Venezuela podía ser un elemento “desestabilizador” en el continente.
En el ámbito diplomático, Estados Unidos presiona e intenta ganar el apoyo de los países del Caribe en la OEA, desde donde busca cercar y aislar a la Revolución Bolivariana. Mientras tanto, mantiene la vigencia del decreto de Obama que señala a Venezuela como una “amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos”, texto legal que el gobierno de Nicolás Maduro denuncia como un intento de justificación de una eventual intervención del país.