Cáucaso, guerra y conflicto con actores conocidos
Los combates entre Armenia y Azerbaiyán no cesan y las grandes potencias juegan su juego (Por Matías Quirno Costa).
Las rivalidades y conflictos entre Armenia y Azerbaiyán no son nuevos. Tal vez sí lo son desde este hemisferio del mundo. Armenia es un país con escasos recursos naturales y económicos. Es un país mediterráneo ubicado al sur de la cordillera del Cáucaso que ha sufrido persecuciones y genocidios, como en 1916, por parte del otrora imperio otomano, hoy Turquía.
Hasta fines de los años 1980 tanto Armenia como Azerbaiyán eran parte del la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Las enormes diferencias culturales y religiosas no eran un problema mayor por aquellos tiempos ya que el estado soviético era ateo y no habilitaba la práctica religiosa. En sus orígenes, Armenia siempre profesó la religión cristiana ortodoxa proveniente de Serbia mientras que Azerbaiyán adopta el islam como credo oficial. Así como describimos a Armenia como un país pobre, no podemos decir lo mismo de Azerbaiyán.
Esta última es una pequeña república, muy rica en recursos, como petróleo y gas pero deficitario en estructuras organizativas capaces de rentabilizar su capacidad de crecimiento. Tal y como plantea en sus objetivos el Observatorio de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras de España.
La diferencia en la economía entre ambos países también se da en el campo militar ya que Azerbaiyán supera ampliamente en capacidad de fuego, en tropas y en recursos a las fuerzas militares armenias. Cabe destacar también que este no es un campo de batalla de dos países en pugna, sino que varias potencias como los miembros de la OTAN, Turquía, Estados Unidos, Israel y Francia que apoyan a Azerbaiyán por un lado y Rusia con sus bases militares en Armenia por el otro hacen sus juegos alrededor del conflicto.
Nagorno Karavaj , un enclave armenio en territorio azerí.
Al desmoronarse la URSS muchas de las repúblicas que la conformaban comienzan a tomar sus propios caminos y las diferencias opacadas por el manto soviético comienzan a florecer. Nagorno Karajav es una región de población de origen armenio y cristiana en pleno territorio de un Azerbaiyán musulmán. Y esto tiene como explicación la intervención de Vladimir Lenin en 1923 que cede este territorio dominado por la Unión Soviética, al país azerí, sin tener en cuenta los diferentes orígenes religiosos y culturales.
Ya en los años de 1990 y con la URSS en decadencia, Nagorno Karavaj decide independizarse de Azerbaiyán y al mismo tiempo anexarse a Armenia, lo que provoca una cruenta respuesta azerí y un conflicto que se mantendrá hasta 1994 cuando se establece un alto el fuego.
Este congelamiento del conflicto no resuelve el problema de fondo. Karavaj no se anexa a Armenia pero Azerbaiyán no logra debilitar la autonomía local. Y así se mantuvo hasta el domingo 27 de septiembre pasado en que las fuerzas azeríes apoyadas por Turquía, eterno enemigo del pueblo armenio, atacaron las zonas de seguridad que rodean Nagorno Karajav y luego iniciaron un gran asedio contra la capital Stepanakert.
Armenia argumenta que ha movilizado sus tropas y entrado en combate para defender a la población civil de Karavaj que está siendo atacada por sus vecinos y que temen se inicie una nueva etapa de limpieza étnica. De hecho, distintas voces dan cuenta de la contratación por parte de Azerbaiyán de mercenarios y efectivos residuales de ISIS y otras bandas terroristas.
Hasta ahora la voz tibia de los países miembros de la ONU ha manifestado la necesidad de hacer un alto al fuego y sentarse en una mesa de diálogo. Por ahora, los combates en el Cáucaso no cesan y los muertos se van sumando día a día.
Matías Quirno Costa
LA NOTICIA EN AUDIO (Voz: Salvatrice Sfilio)
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