Macri pone en marcha un plan de flexibilización laboral
Al regreso de sus vacaciones, el presidente argentino anunció ayer un nuevo marco regulatorio para la explotación para el yacimiento de petróleo y gas no convencionales (shale) Vaca Muerta, ubicado en la provincia de Neuquén y descubierto durante la presidencia de Cristina Fernández. Según Mauricio Macri, la expectativa es que se inviertan 5 mil millones de dólares en este yacimiento, que se explota mediante el método de fracking o fractura hidráulica, de altísimo impacto ambiental.
Entre las principales novedades del plan se destaca una fuerte flexibilización de los convenios laborales en el sector petrolero, en respuesta a una demanda que tenían las grandes compañías. Sin embargo, no se trata de un acuerdo aislado. El Gobierno aspira a replicar en otros sectores los cambios alcanzados con los sindicatos petroleros e incluso ya inició negociaciones similares con la industria de la construcción, donde más empleos se perdieron en los últimos 18 meses.
El argumento de Macri para reducir derechos adquiridos por los trabajadores es que los nuevos convenios generarían mayores inversiones y empleo al reducir el costo laboral de las empresas. Para avanzar en esa línea, el gobierno ya tiene en carpeta una reforma impositiva, un proyecto de ley para cambiar el régimen de las aseguradoras de riesgos del trabajo (ART) y reducir juicios laborales, reimpulsar el sistema de pasantías e incentivar el blanqueo de trabajadores.
En febrero será convocada la Mesa de Diálogo por la Producción y el Trabajo, para acordar con la principal central obrera argentina (CGT) esta hoja de ruta, aunque las negociaciones probablemente se harán por cada sector y gremio.