Piñera da marcha atrás con el ajuste y dicta toque de queda
El presidente de Chile primero reprimió las protestas y luego afirmó que "escuchó la voz del pueblo".
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció este sábado que suspenderá el alza de los pasajes del Metro tras fuertes jornadas de protestas que fueron respondidas por una salvaje represión de los carabineros. También se dispuso un toque de queda para este domingo.
Piñera agregó que la suspensión de la medida, que para concretarse requerirá de una ley, se mantendrá hasta que «logremos un acuerdo que nos permita proteger mejor a nuestros compatriotas frente a alzas bruscas o inesperadas en el precio del dólar o el petróleo».
Piñera dijo que en estas horas se reunirá con los presidentes del Senado y de Diputados y que la próxima semana se reuniría con una mesa “para escuchar la voz y las propuestas de distintos sectores”.
Si bien condenó los hechos de violencia, admitió que las protestas se apoyaron en “buenas razones” e informó que “la brutal violencia delictual ha destruido, incendiado o dañados mas de 78 estaciones del Metro de Santiago”.
Durate la tarde el militar designado por Piñera para «restablecer el orden» en la capital del país, general del Ejército Javier Iturrita, señaló: «He tomado la decisión de decretar la suspensión de libertades y de movimiento a través de un toque de queda total».
“He escuchado con humildad la voz de mis compatriotas y no tendré miedo a seguir escuchando esa voz. Vamos a suspender el alza de los pasajes del Metro”, dijo Piñera tras reunirse con el Comité Político en La Moneda.
El mensaje de “escuchar la voz del pueblo” de Piñera copia el sentido que le dio a esa frase el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, luego de la feroz represión que dejó más de 10 muertos y más de un millar de heridos.
Al igual que su par chileno, Moreno suspendió la liberación del precio y la eliminación de los subsidios a los combustibles, tras las fuertes protestas ciudadanas, en especial por los pueblos indígenas.
Estado de Emergencia
El viernes por la noche, el presidente Piñera decretó el Estado de Emergencia tras las protestas que se realizaron por el aumento del pasaje en Metro y que fueron brutalmente reprimidas por los carabineros.
El mandatario dijo entonces que «el alza ocurrida en los precios de los pasajes del metro (detonante de las protestas) obedece al mandato de la ley, responde al alza que ha ocurrido en el precio del dólar y del petróleo, y fue determinado por un panel de expertos».
Tras los anuncios de aumentos de tarifas, miles de ciudadanos, en su mayoría jóvenes estudiantes, impulsaron durante la semana y en señal de protesta la «evasión masiva» que, entre otras cosas, consiste en saltar los vallados (molinetes) e ingresar al metro sin pagar.
La respuesta del Gobierno de derecha fue aumentar la cantidad de policía en las estaciones, criminalizar la protesta, detener y golpear a los estudiantes, además de responsabilizarlos por la situación.
La represión por parte de los carabineros incluyó no sólo a los manifestantes que protagonizaban actos de violencia sino también a quienes lo hacían de manera pacífica.
Según videos difundidos en las redes sociales, la policía militarizada chilena también protagonizó hechos de violencia en el interior de los vagones del Metro, cuando golpearon a algunos estudiantes.
Fuera del sistema de Metro también hubo protestas que incluyeron marchas, cacerolazos e incendios, en medio de una fuerte militarización de la capital chilena.
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