Pueblos de Perú celebran el freno del mayor plan minero
Por la presión social, las autoridades suspendieron el proyecto Tía María en el valle de Tambo, en el sur del país.
Pobladores y organizaciones sociales y productivas del valle del río Tambo, región de Arequipa, en el sur de Perú, celebran la decisión de las autoridades de suspender el proyecto minero Tía María y se preparan para defender su rechazo durante la etapa de revisión en los próximos meses.
El mega proyecto minero de cobre Tía María, el más grande de Perú, fue frenado por 120 días para abrir una nueva etapa de revisión aunque los pobladores confían en que tal vez se trate de una suspensión de manera definitiva.
Fueron muchos años de resistencia, protestas y archas que se cobraron la vida de al menos una decena personas, numerosos heridos e incalculables daños económicos.
A lo largo de más de 15 años la multinacional estadounidense-mexicana Southern Perú Copper ofreció dinero, bienes y programas sociales y educativos a los pobladores para que tuvieran «una vida mejor».
Las razones que argumentan las autoridades nacionales del Perú para suspender el proyecto están relacionadas con la resistencia social, la «conflictividad», y con las muertes con las que se saldan las protestas.
Desde hace más de 15 años, los pobladores de las zonas urbanas de Arequipa, de al provincia de Islay y de las poblaciones rurales rechazan la instalación de la mega mina para la extracción de cobre.
Argumentan con sus propios estudios ambientales que esto dañará sus recursos naturales, modificará la forma de vida y obligará a muchos a dejar la región.
Southern Copper afirmó que evalúa tomar acciones legales contra Elmer Cáceres, gobernador de Arequipa, por presentar ante las autoridades nacionales recursos de revisión (impugnaciones), acompañado por los pobladores.
Tras estos recursos, el Ministerio de Energía y Minas y el Consejo de Minería resolvieron frenar el multimillonario millonario proyecto de cobre, con la anuencia del presidente de Perú, Martín Vizcarra.
La prensa peruana reveló audios del presidente Vizcarra en una reunión con alcaldes que están en contra del proyecto en los que el mandatario apoya la necesidad de buscar la forma de aceptar los reclamos.
“Lo que hay que hacer es revertirlo, revertirlo también administrativamente. ¿Con qué? Con la medida que presenta el gobernador (de Arequipa)», señala en esa reunión el presidente Vizcarra.
A partir de allí, los sectores de poder que están a favor del proyecto aseguran que el mandatario emitió opinión anticipada de una resolución autónoma que debían tomar los organismos de control.
Previsiblemente la multinacional asegura que persistirá con las obras y reafirma que los beneficios que representa el proyecto valuado en 1.400 millones de dólares no sólo engrosarán sus arcas sino que servirán «a todos los peruanos».
La presión de los pueblos de la región de Arequipa no cesó nunca. En algunos casos con acompañamiento de los alcaldes y otras autoridades locales. En otros casos, sin ellos.
Las protestas comenzaron el mismo año en que se anunció el proyecto, en 2003. El tiempo incluyó etapas de negociación, períodos de intensificación de protestas (como en 2011 y 2015), plebiscitos, reuniones y marchas.
Las demandas se intensificaron en julio pasado cuando el Ministerio de Energía y Minas de Perú otorgó la autorización para la construcción del proyecto tras considerar los estudios de impacto ambiental.
Pero los pobladores respondieron una vez más con bloqueos de carreteras y de una vía de transporte de minerales, frenando temporalmente las exportaciones de cuatro importantes minas de cobre.
Southern Perú Copper Corporation contempla la construcción de dos minas denominadas “Tía María” y “La Tapada” para la recuperación de cobre mediante el sistema de lixiviación.
Tía María está localizado en el valle de Tambo, al norte de la ciudad de Cocachacra, en la provincia de Islay, región de Arequipa.
El valle de Tambo está atravesado por el río que lleva el mismo nombre, que desemboca en el océano Pacífico, y que es uno de los recursos naturales de acceso al agua más importantes y productivos para los habitantes de la zona.
Las autoridades aseguran que el proyecto no se canceló, sino que se suspendió por 120 días mientras dure un proceso con audiencias públicas.
En este tiempo deberán declarar directivos de Southern Perú y los autores de los tres recursos de revisión: el gobernador Cáceres, el Frente de Defensa de los Azucareros de Chucarapi Pampa Blanca y el presidente de la Junta de Usuarios del Valle de Tambo, Jesús Cornejo.
El proyecto ya ha tenido otras suspensiones debido a diferentes recursos presentados por los pobladores. Los habitantes de la región, entre las más pobres de Perú, esperan que esta vez sea la definitiva.
En rigor, si el argumento de las autoridades de Minería para suspender el proyecto es la convulsión social y las víctimas, todo hace pensar que, si eventualmente se reanudan los trabajos, el rechazo social aumentará.
ÚNETE A AMÉRICA XXI Hacemos un periodismo comprometido con la verdad de América Latina desde hace 16 años. Nuestro sitio no recibe financiamiento ni publicidad y se sostiene con el apoyo de lectores y seguidores comprometidos. ¿Nos apoyas?