Putin y Xi preparan acuerdos por 10 mil millones de dólares
Xi Jinping viajó a Moscú para mantener una reunión de dos días con su par ruso, Vladimir Putin, y firmar una serie de acuerdos por un total de 10 mil millones de dólares. Ambos mandatarios ya se encontraron en Pekín en mayo, durante el foro internacional “Una Franja, una Ruta”, y un mes después en la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en Kazajistán. En total se han reunido 22 veces.
Uno de los puntos del encuentro es la escalada de tensiones en la península de Corea, por las crecientes amenazas guerreristas entre Estados Unidos y Corea del Norte. China y Rusia condenan el despliegue del sistema de defensa antiaérea estadounidense denominado Thaad en Corea del Sur, ya que consideran que apunta a ambos países y usa al régimen de Kim Jong-Un como excusa.
El presidente chino, en entrevista con la agencia rusa TASS, afirmó que el sistema Thaad busca alterar “el equilibrio estratégico en la región” y amenaza la seguridad de todos los países de la zona. China ya solicitó formalmente a Washington y Seúl que cancelen su despliegue y reduzcan tensiones con Corea del Norte.
Este no es el único punto en el que ambos países coinciden en el plano mundial. Durante los últimos años, han ido tejiendo puntos en común ante distintos conflictos internacionales, lo que muchos analistas consideran como un factor de estabilizador frente a la política de Estados Unidos. Antes de su arribo a Moscú, Xi Jinping remarcó que las relaciones bilaterales están en el “mejor momento histórico” y que cada país es para el otro su socio estratégico más confiable. También aseguró tener una “gran amistad personal” con Putin.
Según medios chinos y rusos, al finalizar la visita oficial de este 3 y 4 de julio, ambos mandatarios firmarán acuerdos comerciales por alrededor de 10 mil millones de dólares y otra docena de convenios de cooperación. Entre los ejes mencionados están comercio, inversión, conectividad, medios de comunicación y educación.
En la previa de la reunión, este domingo un buque de guerra estadounidense ingresó en aguas chinas, hecho que fue respondido con el envío de buques y aviones de combate para expulsarlo y calificado por Xi Jinping como “provocación”. El mismo día, el presidente chino conversó con sus pares de Japón y Estados Unidos sobre las tensiones en la península coreana.