Turquía: a un año del golpe fallido Erdogan se radicaliza
El primer aniversario del fallido golpe de Estado contra el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, fue utilizado por éste para lanzar más amenazas contra los miles de detenidos por su supuesta participación en una maniobra que tuvo apoyos desde Estados Unidos. “Tanto los miserables golpistas como quienes nos han atosigado, no encontrarán tranquilidad alguna a partir de ahora”, disparó durante su discurso ante el Parlamento en Ankara.
Antes, el líder turco encabezó un acto conmemorativo de la victoria sobre el golpe fallido en el Puente del Bósforo en Estambul, desde donde aseguró que “ningún traidor se quedará sin condena”. No conforme con la amenaza, Erdogan agregó que Turquía no dudará en “triturar la cabeza de aquellos que traicionan” y pidió que se imponga a los miles de detenidos presuntamente vinculados al último levantamiento militar una vestimenta similar a la de los presos en la base estadounidense de Guantánamo.
Erdogan aseguró que si el Parlamento aprueba la pena de muerte no dudaría un segundo en restaurarla y acusó a la Unión Europea (UE) de “jugar” con el pedido de ingreso de su país al bloque, que ya lleva varias décadas: “54 años después y todavía nos toman el pelo”, criticó.
Se estima que en los últimos 12 meses alrededor de 150 mil personas fueron despedidas o suspendidas de sus trabajos y más de 50 mil detenidas por sospecha de vínculos con el clérigo musulmán Fethullah Gulen, acusado por Erdogan como líder del intento golpista.