Brasil: significativo paro general contra Bolsonaro
En distintos puntos del país grupos de trabajadores y estudiantes salieron a manifestarse en apoyo a la huelga general realizada este viernes por todas las centrales obreras. El punto principal es el rechazo al proyecto de reforma del sistema de jubilaciones y pensiones que prepara el Congreso.
Más allá de los reclamos puntuales, el paro general expuso el creciente clima de rechazo al gobierno de Jair Bolsonaro, que comenzó a sufrir una escalada de las manifestaciones en su contra desde que dispuso recortes al presupuesto de universidades públicas.
Las centrales sindicales reportaron movilizaciones en unas 300 ciudades del país y según la Central Única de Trabajadores (CUT) fueron alrededor de 45 millones las personas que acataron la huelga o se movilizaron.
Una de las claves de la jornada fue el paro del transporte público, parcial o total según cada ciudad. En 19 de las 27 capitales estaduales el sistema de ómnibus quedó paralizado y en las restantes ocho el transporte quedó afectado por cortes de vías o incluso por paro del metro.
Lo mismo sucedió en puertos, refinerías, empresas metalúrgicas y automotrices, bancos, centros de salud y educación universitaria, entre otros sectores que encabezaron la huelga nacional.
Además del paro, decenas de actos públicos completaron la jornada, en la que se destacaron las movilizaciones de otros sectores como el Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) y Sin Techo (MTST), entre otros.
Además de las 12 centrales sindicales, los Frentes Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo participaron de la convocatoria contra la agenda de gobierno de Bolsonaro.
“Las centrales sindicales no vamos a debatir la quita de derechos. Queremos un sistema de seguridad social general, amplio y público”, planteó Vagner Freitas, presidente de la CUT.
Sin embargo, salvo algunos cambios puntuales, la prensa brasileña afirma que el Gobierno ya tiene los votos suficientes para aprobar la reforma.
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