Un Tribunal de Sentencia de la Corte Suprema de Justicia de Honduras condenó a penas de entre 30 y 50 años de cárcel a siete de los nueve implicados en el asesinato de la dirigente campesina de derechos humanos Berta Cáceres, ocurrido en 2016.

El tribunal estableció que cuatro de los sentenciados deberán permanecer en la cárcel 50 años, ya que fueron declarados culpables por los delitos de asesinato en perjuicio de Cáceres y asesinato en grado de tentativa en contra de un testigo protegido que acompañaba a la víctima el día del crimen.

Los dos procesados restantes recibieron condenas de 30 años de cárcel, uno por encontrarlo culpable como coautor del delito de asesinato consumado y al otro por el delito de autor por omisión en un caso de asesinato.

Además, otro procesado estará 30 años en prisión por el delito de asesinato en su grado de tentativa.

Berta Cáceres fue asesinada el 2 de marzo de 2016 de varios impactos de bala en el interior de su vivienda, ubicada en la ciudad de La Esperanza, al occidente de Tegucigalpa.

Uno de los actores intelectuales del asesinato, según el fallo de la Corte, es Sergio Rodríguez, gerente ambiental de la empresa Desarrollos Energéticos (DESA), una compañía a la que Cáceres se opuso por intentar instalar una hidroeléctrica en el río Gualcarque.

También fue imputado David Castillo Mejía, presidente de DESA, al que la Fiscalía del Estado acusó de autor intelectual del asesinato de la ambientalista, aunque por haber sido capturado el 2 de marzo de 2018, su proceso está pendiente de llegar a juicio oral y público.