Vulgar campaña anti rusa de la prensa estadounidense
A medida que se acerca el fin del mandato del presidente Barack Obama, y con ello la asunción de Donald Trump en la Casa Blanca, arrecia desde Washington una campaña sin fundamentos contra Rusia, apoyada en denuncias, sanciones y notas periodísticas rimbombantes.
El último caso fue el de The Washington Post, que el viernes 31 de diciembre publicó un artículo de alto impacto titulado “Hackers rusos penetraron la red eléctrica estadounidense”, al citar altos cargos estadounidenses que pasaron esa información al periódico.
El artículo informa que “un código asociado con una operación de piratería rusa, apodada Grizzly Steppe por la Administración Obama, fue detectado en el sistema de una entidad (eléctrica) en Vermont” y que “la penetración en la red eléctrica de la nación es significativa porque representa una potencial y seria vulnerabilidad”.
Esta denuncia se sumaba a otras anteriores que hicieron hincapié en supuestas intervenciones de hackers rusos en la campaña electoral estadounidense y contra el gobierno y los ciudadanos, a partir de las cuales Obama responsabiliza al gobierno de Vladimir Putin y endureció las sanciones contra el país.
Pero apenas una hora después de publicada la noticia, la empresa eléctrica Burlington Electric refutó que hubiera sido penetrada la red y lo propio hicieron las autoridades estatales después. Ante esta situación, el otrora prestigioso periódico modificó el título y agregó una nota aclaratoria al final para hacer alusión a los “errores”, que finalmente debió poner al inicio del artículo. “La computadora ‘hackeada’ de Burlington Electric no estaba conectada a la red», se lee en ese apartado.
La maniobra fue tan burda que otros medios estadounidenses como la revista Forbes tomaron el caso y lo repudiaron. Según este medio, el artículo tenía los siguientes errores groseros:
- Resultó que no se trataba de una red o de múltiples computadoras afectadas, sino de una sola computadora portátil.
- La computadora no estaba conectada al sistema de la organización, o sea que no hubo ‘hackers rusos’ accediendo a las profundidades de la red de electricidad nacional.
- El código malicioso hallado en la computadora estuvo asociado anteriormente con los ‘hackers’ rusos. Desde entonces este software está en venta libre, es decir puede ser usado por cualquiera.
- No necesariamente fue introducido deliberadamente en el marco de una operación de piratería, sino que la computadora pudo resultar infectada al visitar un empleado de la empresa alguna página web.
- En vez de comunicarse con la empresa donde ocurrió, “The Washington Post” simplemente publicó la noticia tal como esta le fue cedida por altos cargos del Gobierno.
La prensa estadounidense atraviesa una grave crisis de credibilidad, tal como quedó demostrado en la última campaña electoral, donde pese a apoyar fuertemente la candidatura de Hillary Clinton, no pudo impedir el triunfo del nacionalista y ultraderechista Donald Trump.
Con información de RT