Rechazo popular y de sectores empresarios al gobierno de México
Ignacio Díaz – América XXI
Marchas, cortes de carreteras y saqueos. En distintos puntos del país esas son las principales novedades que trajo la llegada de 2017, tras la entrada en vigor de un aumento de 20% en el precio de las gasolinas y el diesel. El saldo tiene ya seis muertos, cientos de detenidos y un clima social enardecido, donde se entremezclan las protestas pacíficas con saqueos, actos de vandalismo y violentas represiones policiales.
Cientos de integrantes de organizaciones políticas y sociales, productores agropecuarios y amplias franjas de la población salieron nuevamente a las calles ayer contra el gasolinazo en diferentes ciudades de al menos 13 estados del país.
En un intento por contener la bronca popular, el presidente Enrique Peña Nieto presentó un Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar para revitalizar el mercado interno, vigilar precios y lanzar medidas concretas para los sectores más afectados por la delicada situación económica que atraviesa el país, agravada tras el triunfo de Donald Trump en Estados Unidos.
Inesperadamente, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), que aglutina empresarios de todos los sectores, rechazó firmar el acuerdo tras catalogarlo de “improvisado” y declaró: “Los mexicanos necesitan urgentemente un liderazgo que ponga la mirada en los temas relevantes, que con serenidad los afronte sin miedo, con cambios de fondo, que genere consensos sociales en todos los sectores, que verdaderamente coloque a México como prioridad”.
En un acto donde contó con la asistencia y el apoyo de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Peña Nieto argumentó que “el incremento en los precios de las gasolinas vino a reflejar en el precio del aumento del petróleo. El ajuste no es consecuencia ni de la Reforma Energética ni de la Hacendaria. De no ajustar el precio las finanzas habrían tenido presión adicional”, se defendió respecto al aumento del precio de la gasolina. Y agregó: “A excepción de Venezuela, Ecuador y Bolivia, en el resto de los países (latinoamericanos) la gasolina es más cara, incluyendo Centroamérica y Cuba, donde el precio es más elevado”. También
En contrapartida, la confederación empresarial opinó que la situación económica y social que atraviesa el país requiere un verdadero y amplio acuerdo de todos los sectores sociales, que no puede construirse en tres días, y no uno “que solo sirva como estrategia de comunicación o imagen pública”.
Sobre el acuerdo, el Secratario de Hacienda, José Antonio Meade, anunció: “Entre las medidas que el Gobierno asume están: emitir un decreto para fomentar el retorno de capitales que se encuentren en el extranjero; modernizar el transporte público y facilitar la movilidad urbana; garantizar un creciente superávit primario, reduciendo el endeudamiento del Gobierno Federal; reducir en 10 por ciento la partida de sueldos y salarios de servidores públicos de mando superior de dependencias federales y exhortar a los demás poderes a que hagan lo mismo”.
Según encuestadoras, la aprobación del Presidente cayó a menos de un cuarto de la población y ese rechazo popular es capitalizado principalmente por Andrés Manuel López Obrador, ex referente del PRD y actual líder del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que encabeza los sondeos de los posibles candidatos para las elecciones presidenciales de 2018.