La ministra de Salud de Argentina, Carla Vizzotti, confirmó este miércoles que el país fue autorizado a producir las dos dosis de vacunas Sputnik V, luego de que el Instituto Gamaleya de Rusia aprobara las muestras que fueron enviadas hace un mes.

Rusia dio su aprobación para enviar los principios activos a Argentina para que la empresa Richmond comience la producción de la Sputnik, la vacuna más efectiva de las que actualmente se comercializan en todo el mundo.

Un día antes, el presidente Alberto Fernández firmó una extensión del contrato con el Instituto Gamaleya y el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) por diez millones de dosis de Sputnik V adicionales.

De esa manera, la parte rusa se comprometió a entregar un total de 20 millones de vacunas: diez pendientes y diez del nuevo contrato.

En la misma jornada, el embajador argentino en Cuba, Luis Ilarregui, reafirmó que las vacunas producidas en Cuba Soberana02 y Abdala «probablemente» lleguen en agosto a Argentina.

«Cuando en Cuba hayan vacunado al 70% de su población, que será en agosto, la vacuna cubana seguramente llegara a la Argentina», sostuvo el diplomático argentino en La Habana.

Ilarregui hizo este anuncio tras la reunión que la ministra de Salud, Carla Vizzotti, la asesora presidencial, Cecilia Nicolini y el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, mantuvieron días atrás en La Habana.

Según coincidieron fuentes de ambos gobiernos la visita que las funcionarias argentinas realizaron a la nación caribeña, tuvo «un muy buen resultado».

«Se reunieron con las autoridades sanitarias y con el ministro de salud cubano y firmaron una carta de intención y una carta para la confidencialidad», completó el representante argentino en Cuba.

El martes, además, la asesora presidencial Cecilia Nicolini consideró como una posibilidad que la Argentina cuente el año próximo con una «vacuna diseñada, desarrollada y producida» en el país.

Se refirió así al desarrollo conjunto que están realizando el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet) y la Universidad Nacional de San Martín (Unsam).

«Estamos desarrollando nuestras propias vacunas candidatas con el Conicet y con investigadores de la Unsam», afirmó Nicolini, y señaló que es «posible que el año que viene contemos con una vacuna diseñada, desarrollada y producida en la Argentina».

La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)

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