Dirigentes y militantes de movimientos sociales, organizaciones de izquierda y organismos de derechos humanos de Argentina recordaron este sábado a Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, dos jóvenes militantes sociales asesinados por la policía de la provincia de Buenos Aires en la denominada «Masacre de Avellaneda» hace 19 años.

Partidos de izquierda y organizaciones se movilizaron y cortaron el Puente Pueyrredón, que une la ciudad de Buenos Aires con la provincia, hacia dónde habían marchado miles de personas el día en que Kosteki y Santillán fueron perseguidos y fusilados.

«A 19 años, la impunidad sobre este crimen de Estado muestra la continuidad de un aparato represivo que mantiene intacta su política represiva a las luchas y al movimiento popular», plantearon esas agrupaciones en un comunicado de prensa.

Asimismo reclamaron «juicio y castigo para todos los responsables» y denunciaron «la complicidad y el mantenimiento del aparato represivo que sigue atacando a los luchadores populares y persiguiendo a la juventud».

«Las causas por las que lucharon Maxi y Darío están más vigentes que nunca», concluye el texto, firmaron entre otros por el Partido y el Polo Obrero.

Bajo el gobierno del entonces presidente Eduardo Duhalde, el 26 de junio de 2002, organizaciones se movilizaron al Puente Pueyrredón en reclamo de subsidios para desocupados y alimentos para comedores comunitarios, en el contexto de la peor crisis política y social de la historia reciente del país.

Tras un feroz operativo represivo y una carecería montados en cercanías de la estación Avellaneda del ferrocarril (que hoy lleva el nombre de las víctimas), fueron asesinados Kosteki, de 21 años, y Santillán, de 25, quienes eran militantes de la ex Coordinadora Aníbal Verón en el sur del conurbano bonaerense.

La Masacre de Avellaneda llevó a condenas de cadena perpetua para los dos policías identificados por fusilar a ambos jóvenes y otros oficiales fueron sentenciados a prisión por el encubrimiento, pero las autoridades políticas no fueron involucradas, pese a los indicios de que se trató de un operativo armado bajo decisiones superiores.

Los dirigentes sociales asesinados también fueron recordados a través de diversos posteos en las redes sociales. «A 19 años de la masacre de Avellaneda, su ejemplo vive en todos los compañeros y compañeras que luchan todos los días por construir un país más justo», publicó el Movimiento Evita.

La secretaría de Derechos Humanos de Argentina recordó: «Se cumplen 19 años de la Masacre de Avellaneda, en la que los militantes sociales Maximiliano Kosteki, de 25 años, y Darío Santillán, de 21 años, fueron asesinados por agentes de la policía bonaerense durante la movilización en reclamo de planes sociales del 26 de junio de 2002».

«Que cada 26 de junio nos sirva para enaltecer el compromiso del Estado con los Derechos Humanos. Darío Santillán y Maximiliano Kosteki están presentes en la lucha de cada trabajador», destacó el secretario de la CTA y diputado Hugo Yasky.

Foto: Francisco Lucotti, para la Agencia Sputnik.

La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)

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