La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) denunció las muy graves consecuencias para los habitantes de la Franja de Gaza que deja la decisión de grandes potencias de cortar el financiamiento internacional, luego de una denuncia de Israel.

«Mientras la Corte Internacional de Justicia pide a Israel que tome medidas para garantizar la ayuda humanitaria en Gaza para evitar «daños irreparables», nueve países han retirado su financiación a UNRWA», señaló la agencia en un comunicado.

UNRWA agrega que «en el peor momento, cuando la supervivencia diaria de más de 2 millones de personas depende de nosotros» y se pregunta «¿Así pretenden evitar los daños irreparables?».

La muy grave crisis humanitaria se profundizó luego de que varios países quitaran el financiamiento a UNRWA tras la denuncia de Israel, país invasor, de que la agencia de la ONU permite a la organización palestina Hamas utilizar las infraestructuras en Gaza para actividades militares.

Luego de esto, Estados Unidos, que es el mayor donante de la agencia, recortó la financiación, seguido por otros ocho países, entre ellos Reino Unido, Alemania, Francia e Italia., naciones que, en conjunto, proporcionan casi el 60% del presupuesto de la UNRWA.

Este miércoles, tanto el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, como la Unión Europea defendieron las tareas de la agencia para los refugiados palestinos.

«Ayer me reuní con los donantes para escuchar sus preocupaciones y exponer las medidas que estamos tomando para abordarlas (…) Unrwa es la columna vertebral de toda la respuesta humanitaria en Gaza», dijo Guterres a un comité de la ONU sobre los derechos de los palestinos.

Una carta finada por Cristina Poveda, de la agencia UNRWA en España, señaló que «somos una agencia especial en la que el 95% de nuestros compañeros son refugiados y refugiadas de Palestina. Nadie como ellas y ellos para cuidar de su propia comunidad».

«Cuando piensas que nada puede empeorar el bombardeo israelí, las acusaciones sobre la presunta implicación de varios empleados en los horribles ataques del 7 de octubre provocan que nos retiren los fondos», agrega la nota.

Poveda admitió que «nosotros ya estábamos investigando y habíamos rescindido contratos» frente a algunos casos detectados, pero «aún así, estos países nos retiran su apoyo y abandonan a niños y ancianos que luchan en estos momentos por no morir de hambre, de enfermedades o bajo los ataques israelíes».

«Esto es un castigo colectivo adicional para la población gazatí que es arrastrada hasta el más hondo infierno», afirmó el comunicado de la agencia en España.

Recordó que «nuestros 5.000 compañeros en Gaza trabajan cada día bajo el incesante bombardeo para seguir garantizando comida, agua y refugio».

«Es absolutamente inaceptable que estos países tomen la decisión de desproteger a mujeres, hombres y niños inocentes de esta manera», completan.