Mensaje del Estado Mayor Superior de la Fanb – Por Vladimir Padrino López
19 abril, 2017
category: DOCUMENTOS
Cuando el comandante supremo de la revolución bolivariana, hugo rafael chávez frías, concibió la milicia bolivariana, en uno de sus más brillantes destellos de patriotismo y como parte de su estratégica visión popular para la defensa integral de la nación, tenía certeza de los complejos retos que debíamos enfrentar en el futuro cercano; conocía perfectamente la vileza y la perfidia con que actúan los enemigos de la patria, los de siempre, los de ayer y los de hoy.
Sabía también que el imperio norteamericano y sus acólitos foráneos e internos, nunca descansarían en su insano propósito de subyugarnos y apoderarse de las riquezas que nos pertenecen; entendía cabalmente el juego perverso de las potencias extranjeras, de las grandes transnacionales y lo peor de todo, la bajeza moral y la felonía con que opera la oligarquía criolla; la misma que traicionó el sueño libertario e integracionista de bolívar, la que asesinó a zamora y truncó su proyecto de igualitarismo; la que quiso derrocarlo y a pesar de no haberlo conseguido, a raíz de su desaparición física, continúa en el intento de destruir su hermosa propuesta social en defensa de las masas desposeídas y de los más vulnerables.
Por eso creó este cuerpo especial que felizmente arriba a su séptimo aniversario, en una coyuntura crucial para el país; pues la ambición desmedida de esos enemigos amenaza su paz y su estabilidad, al ejecutar una agenda criminal y cargada de odio que incluye actos terroristas, disturbios, saqueos, vandalismo y distintas formas de violencia contra personas inocentes e instalaciones públicas de salud, educación y demás servicios necesarios para el buen desenvolvimiento de la sociedad, tratando de generar zozobra en la población, anarquía y caos, con el innoble propósito de derrocar al gobierno democrático, electo mediante el voto mayoritario de los venezolanos y venezolanas, legítimamente constituido.
Es imperativo señalar que estas bandas violentas son financiadas desde el exterior por organizaciones de derecha radical, como comienza a observarse en las investigaciones correspondientes; lo que resulta sumamente grave toda vez que esta situación podría degenerar en la conformación de grupos extremistas tal como se ha visto en otras regiones del mundo, con las nefastas consecuencias que esto implica, y que no deseamos para nuestra amada venezuela.
Este plan facineroso traiciona con premeditación y alevosía los más sagrados intereses de la nación, como son la libertad, la independencia, la soberanía, el desarrollo y la convivencia pacífica, entre otros, ya que en su sombría pretensión ha promovido con desparpajo el intervencionismo extranjero, recurriendo para ello a oscuros personajes, desacreditadas organizaciones multilaterales y a una alianza de países que, con argumentos vanos, la mentira, la manipulación, el engaño y otros mecanismos inescrutables, persiguen construir una imagen aberrante de la realidad del país para justificar su injerencismo.
Peor aún y por lo mismo detestable, resulta saber que este libreto es auspiciado y orquestado por algunos diputados de la asamblea nacional, que colocados flagrantemente de espaldas a la constitución y movidos por el interés particular o de los grupos de poder que representan, se han volcado a minar la institucionalidad del estado y obstruir la gestión del poder ejecutivo orientada a la solución de los problemas que nos afectan.
Quienes fomentan la desestabilización y la violencia de golpe de estado, hablan de totalitarismo y de dictadura en un país donde está garantizado el pluralismo político, las libertades democráticas y el respeto a los derechos humanos; pero contradictoriamente a esa matriz que han venido tejiendo a la sombra de la falsedad y la calumnia, hoy recordamos aquellos aciagos días del 11, 12 y 13 de abril de 2002, cuando secuestraron de este mismo palacio al presidente hugo chávez y desataron la más brutal agresión contra el pueblo que reclamaba su retorno como jefe de estado.
Por todo lo expuesto, nos unimos jubilosos a esta celebración en memoria histórica del 13 de abril de 2002, cuando el pueblo venezolano junto a sus soldados y soldadas, rescataron al líder de la revolución bolivariana de las fauces de traidores carentes de honor. ¡hoy vibra con mayor ímpetu el alma colectiva en la cual se funden la fuerza armada nacional bolivariana, la valerosa milicia bolivariana y ese bravío pueblo!, que constituyen la estructura medular para la defensa de venezuela; es un corazón tricolor que enérgico y combativo late vigoroso de lealtad para consigo mismo y las reivindicaciones sociales que con tanto esfuerzo se han conquistado.
Hoy toda la institución castrense, aferrada al ideario bolivariano y a sus más prístinas tradiciones libertarias, junto a los milicianos y milicianas, cuerpos combatientes y formaciones especiales, así como los hombres y mujeres que aman esta sagrada tierra; expresa ante venezuela y el mundo entero su vocación pacifista; pero al unísono reitera su condición radicalmente antiimperialista, zamorista y consecuentemente antioligarca, chavista e indefectiblemente nacionalista. Por tal razón rechazamos con absoluta firmeza la deslealtad e infamia que encarnan los llamados al injerencismo e intervencionismo en cualquiera de sus formas. ¡no aceptaremos bajo ningún pretexto que se viole el legítimo derecho a la autodeterminación nacional!.
Repudiamos de manera categórica todo tipo de manifestación violenta; en tal sentido seguiremos cumpliendo la tarea constitucionalmente asignada de cooperar con el mantenimiento del orden interno y la preservación de la paz ciudadana.
No puede llamarse represión a la acción del estado orientada a la restitución del orden público con perfecto apego a lo consagrado en la carta magna y demás instrumentos jurídicos nacionales e internacionales que rigen los derechos humanos. Insisto en la reflexión: ¡no se entiende con qué moral pueden hablar de respeto a tales derechos, aquellos que los violaron inescrupulosamente en la falsa democracia del pasado!.
Rechazamos de igual modo los vejámenes y ofensas que de manera sistemática se vienen realizando contra nuestra gloriosa institución y sus integrantes; sabemos que se trata de un plan cuidadosamente concebido para golpear el honor militar y minar la moral y la integridad de sus mandos orgánicos. Nunca se había visto una campaña semejante en magnitud e intensidad como en las últimas semanas. Quienes la llevan a cabo desde sus cómodas posiciones en el exterior, con sus operadores y lacayos internos, pierden su tiempo. ¡no lo lograrán jamás!.
Se trata sin duda de una actitud primitiva y desesperada, anclada en las típicas montoneras y el viejo militarismo, lo cual es completamente contrario a nuestra naturaleza jurídica y filosófica; pero sobre todo a la auténtica conciencia patriótica y convicción democrática que tenemos en nuestro seno.
¡nada nos detendrá en el anhelo de seguir consolidando la venezuela bolivariana, la venezuela potencia, la venezuela independiente y soberana!.
En esta intención, la fuerza armada nacional bolivariana preserva su unidad monolítica y granítica, ratifica su lealtad incondicional al señor presidente constitucional de la república bolivariana de venezuela, nuestro comandante en jefe, ciudadano nicolás maduro moros.
¡la institución castrense se apega a la constitución y cumple su misión bajo su autoridad mi comandante en jefe!, no solo porque es un presidente electo por el pueblo, sino también porque fue el mandato del comandante hugo chávez, cuando nos pidió ¡unidad, unidad, unidad y más unidad de las fuerzas revolucionarias!, incluida la fuerza armada nacional bolivariana. También por su constante preocupación por nuestro apresto operacional, por nuestro bienestar, por nuestra expansión y desarrollo institucional; presidente auténticamente chavista y que la fuerza armada admira profundamente.
Nos unimos pues a su llamado mi comandante en jefe, “al renacer del espíritu nacional, como usted mismo nos dice, en su llamado al espíritu de la unión, del espíritu del amor para seguir construyendo la patria…”, invocando la protección del todopoderoso, a fin que nos ilumine y con su divina bendición propicie el encuentro fraterno y la hermandad que siempre nos ha caracterizado.
“que viva la milicia bolivariana…”
“que viva bolívar…”
“que viva zamora…”
“que viva la unión cívico militar…”
“chávez vive… la patria sigue…”
“independencia y patria socialista…”
Viviremos y venceremos…”
Vladímir Padrino López
General en jefe
Ministro del Poder Popular Para la Defensa y Comandante Estratégico Operacional de la Fanb