Por Adrián Fernández

Dos mujeres del Movimiento Nacional de Abuelas Comadronas Nim Alaxik de Guatemala visitaron la ciudad de San Martín de los Andes, en la Patagonia argentina, para difundir sus saberes ancestrales en un contexto de larga lucha por su reconocimiento por parte de las autoridades guatemaltecas.

Las comadronas Mama Antonia García Chuc y Aura Marina Ajbal Cujcuy compartieron sus conocimientos sobre el cuidado ancestral de embarazos, nacimientos y puerperios en esta ciudad andina de la provincia de Neuquén.

Ambas pertenecen al Movimiento Nim Alaxik (gran nacimiento, en español), que actualmente tiene más de 23.200 integrantes, provenientes de diversas comunidades lingüísticas de Guatemala.

Estas dos representantes realizaron varias actividades en la ciudad patagónica, la principal durante un conversatorio realizado en un centro comunitario de San Martín de los Andes, del que participaron casi cien personas.

Estuvieron acompañadas por Adriana Marcus, investigadora y divulgadora de plantas medicinales, quien presentó la «Pequeña guía verde para acompañar las emociones», Sandra Marín, de la Red Jarilla; la escritora Marisa Godoy; representantes de la comunidad Mapuche y de diferentes organizaciones.

El Movimiento Nin Alaxik ha logrado sobreponerse a la persecución de la que, mujeres indígenas y de ámbitos rurales, fueron víctimas durante la dictadura; muchas de las cuales fueron encarceladas.

Las Abuelas Comadronas son las guardadoras de saberes ancestrales a partir de una plena consciencia del conocimiento que su territorio ofrece en relación a las plantas y los nacimientos.

Son muy requeridas por las comunidades indígenas y realizan un trabajo colectivo, recorriendo las comunidades y llegando a sitios a los que no accede salud pública.

Mamá Antonia y Aura Marina explicaron que las Abuelas Comadronas llevan años luchando por sus derechos y porque su trabajo sea reconocido, de manera de poder interactuar con la medicina occidental.

En septiembre de 2016, la organización Nim Alaxik y otros consejos del altiplano del país, presentaron un amparo en la Corte Suprema de Justicia para demandar al Ministerio de Salud por falta de reconocimiento, respeto y promoción de su trabajo.

Desde hace muchos años, el Ministerio de Salud de Guatemala lleva adelante intentos para acercar a la población al sistema oficial de sanidad,pero un muy alto porcentaje de mujeres confía en las Abuelas Comadronas.

El presupuesto nacional en Salud es escaso y el acceso a las comunidades muy complicado. Además de esto, las mujeres indígenas desconfían del sistema oficial, ya que se sienten víctimas de discriminación y racismo, además del impedimento del idioma.

Esa confianza en la medicina ancestral y el rechazo al sistema de salud oficial han acercado en los últimos tiempos algunas posiciones que buscan la convivencia entre ambos.

«Hemos tenido mesas técnicas con funcionarios del Gobierno, con diputados y del Ministerio de Salud, pidiendo que cesen todas las violaciones y los atropellos que se hacen contra nuestros derechos», señaló Mamá Antonia.

Agregó que, tras largas negociaciones, «ahora estamos buscando la coordinación para que se lleven de la mano la medicina ancestral con la medicina occidental», porque ambos se complementan.

«Nosotras no podemos hablar mal de la medicina occidental porque cuando se presenta un embarazo de alto riesgo, tenemos que referirles al hospital», señaló Mamá Antonia, quien explicó que el 60% de las mujeres en Guatemala se atienden con las Abuelas Comadronas.

«En Guatemala se está buscando que convivan la medicina ancestral con la atención en hospitales, atendiendo en armonía», agregó, aunque destacó que las Abuelas Comadronas saben escuchar y atender otras cuestiones como violencia intrafamiliar o crisis de parejas.

Como parte de esa lucha han logrado en los últimos años que estas mujeres puedan acceder a el Carnet de la Madre Comadrona y que oficialmente se celebre su día cada 19 de mayo.

Aura Marina afirmó que este conocimiento ancestral y el talento de atender los partos lo reciben desde el nacimiento y destacó la confianza que generan las Abuelas Comadronas en sus comunidades.

El paso de ambas mujeres por San Martín de los Andes generó momentos muy emotivos y un profundo reconocimiento por la lucha del Movimiento y de las mujeres indígenas de Guatemala para resignificar su labor ancestral.

(Audios: Radio Nacional San Martín de los Andes)