Derecha golpista apuesta al desabastecimiento en Bolivia
Los cívicos de Santa Cruz, afines al golpista Luis Fernando Camacho, bloquean caminos en Camiri y la Chiquitania, impiden el paso de cisternas cargadas de combustible a la ciudad y ponen en riesgo el abastecimiento.
El ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, advirtió que en un par de días habrá desabastecimiento, no solo para el parque automotor sino para el sector agropecuario, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria, advirtió
“Al paso que va, en un par (de días) podría tener un desabastecimiento total de combustible en Santa Cruz”, aseguró e informó que la misma situación de riesgo se proyecta para la provisión de Gas Licuado de Petróleo (GLP) que, principalmente, es utilizado en los diferentes hogares de las familias cruceñas.
El sábado empezó el paro cívico en Santa Cruz, aunque el transporte y el comercio desarrollan sus actividades con relativa normalidad.
El gobernador Fernando Camacho convocó, desde el denominado Comité Interinstitucional, al paro al fracasar su propuesta de realizar el censo nacional en 2023, previsto originalmente para noviembre próximo.
Molina advirtió que la seguridad alimentaria está en riesgo, porque la falta de combustible en el agro dificulta la campaña de siembra.
La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) ya hicieron conocer su preocupación ante esta compleja situación, que afecta sus actividades.
Los cívicos en Camiri y la Chiquitania también impiden que salgan las cisternas para importar el combustible, según alertó el gobierno del presidente Luis Arce.
“Hoy tenemos que avisar e informar de que tenemos este desabastecimiento, por causas atribuibles a este paro injustificado», insistió el ministro.
Afirmó que la medida «afecta a nuestro sector productivo, pero, particularmente, pone en riesgo la campaña de verano y el garantizar la seguridad alimentaria del país”.
Organizaciones sociales e indígenas de Santa Cruz dieron este sábado un plazo de 48 horas a los cívicos cruceños para instalar mesas técnicas sobre el censo con el Ejecutivo.
Anticiparon un cerco a la ciudad y suspensión de servicios petroleros y de gas domiciliario si se mantiene el paro indefinido en la capital cruceña.
Repudiaron, además, “la intransigencia” del gobernador Fernando Camacho y los cívicos que el sábado abandonaron la reunión con el Gobierno planteando fijar fecha del censo en 2023.