¿Es nuestra Revolución cultural? – Por Iván Padilla Bravo
05 mayo, 2019
category: FORO DEBATE
En Venezuela la Revolución Bolivariana fue definida por su líder fundador, Comandante Hugo Chávez, como cultural.
Esa caracterización no se asumió desde el comienzo del proceso pero hoy, el concepto lo manejamos tod@s. «Esta Revolución es cultural o no es revolución», solía decir nuestro Comandante Supremo. Aunque no sé si hemos asumido una misma definición en torno al concepto cultura y cultural.
Cultura no es un concepto económico pero cuando el capitalismo lo encasilla dentro de un «sector» y nos obliga a reunirnos o actuar como «sector cultura» es porque nos ha reducido ideológicamente a su interés de clase por convertir todo en mercancía.
Es verdad que todo lo cultural está determinado por la manera como los individuos nos relacionamos para producir, en una determinada sociedad. En nuestro caso, la capitalista.
Ningún concepto de cultura, por muy «antropológico» que se le diga, está por encima de la determinación con la que lo marca la lucha de clases.
Por eso es que para el capitalismo no existe cultura, a menos que los productos de ésta (de las culturas,para ser exactos) puedan intercambiarse como mercancías provenientes de unas élites que las generan como «bellas artes».
En ese proceso de «producción cultural» capitalista, sus productores específicos terminan arrinconados en un «sector» así como los hay en otras agrupaciones de afines productivos como el sector textil, el sector agrícola, el sector industrial y todos los sectores que se puedan inventar para complacer la visión economicista propia al capitalismo que, finalmente, todo lo escinde y todo lo cosifica como mercancía para poder existir de manera justificada en esta sociedad de explotación.
La cultura de identidad en una determinada sociedad es su manera de mirar al mundo, su cosmovisión. Por eso, en el capitalismo la cultura es la manera como los explotadores, los dueños de los medios de producción, explican y entienden al mundo para dominarlo.
Pero también la cultura comprende los valores propios a la cosmovisión de una determinada sociedad y sus relaciones de producción. Visto de este modo, la sociedad capitalista se guía y norma por valores burgueses, por valores subordinados a la producción en desigualdad, a la producción donde unos pocos -dueños de los medios de producción- explotan y dominan a la inmensa mayoría de sin nada, que deben vender su «única mercancía para intercambiar», la fuerza de trabajo.
Partiendo de estas apreciaciones es como podemos explicarnos que la sociedad de los burgueses, la sociedad capitalista, considere a «la cultura» como un «sector» que si no es productivo, si no enriquece al pequeño grupo de burgueses que domina al mundo, entonces deben conformarse con el discriminatorio, con el excluyente término de «cultura popular».
Se entiende entonces que siendo dominantes, en toda sociedad, las ideas de la clase dominante, se suscriban acríticamente -por la gran mayoría de la sociedad- conceptos como ese del «sector cultura».
El propio Comandante Chávez problematizó -en los hechos- el concepto economicista de cultura al apartarlo de la calificación de «sector» y definir la cultura en Revolución a partir de todo un pueblo indiscriminadamente creador: «El pueblo es la cultura», diría Chávez en el 2005 con el naciente Ministerio para acompañar estos procesos revolucionarios y que hoy conocemos con el nombre Institucional de Ministerio del Poder Popular para la Cultura (MPPC).
Adelantamos toda esta reflexión con marco histórico y sin embargo, todavía hoy, cuando se trata de reunir o desarrollar determinadas acciones, se sigue convocando a un fulano «sector cultura». Es decir, pareciera que hemos avanzado poco en la batalla de las ideas.
Antonio Gramsci, el revolucionario italiano que se ocupó críticamente de proponernos un concepto de inclusión para definir a los intelectuales por su carácter orgánico de clase, también abrió caminos para el debate acerca de la Revolución cultural. Nos ayudó Gramsci a comprender la auténtica radicalidad de una Revolución, cuando explica que ella debe llegar a la raíz y ser capaz de romper epistemológicamente la cosmovisión y los valores impuestos por los dominadores. La Revolución Cultural, en términos gramscianos, es la «reforma intelectual y moral de una sociedad». No es un sector, es el pueblo ennuevecido en una construcción clasista, de lucha dialéctica de clases, de la nueva sociedad, del socialismo.
Si no somos capaces hoy de pensar como posible a la sociedad de las y los iguales, a la comunista, será muy poco lo que lograremos avanzar para que nuestra Revolución Bolivariana sea de verdad una Revolución Cultural.
Ilustración: Formoso
2 Comments
Alirio Márquez
May 6, 2019, 11:07 am
Ciertamente la cultura popular se ha incrementado con una conciencia nacionalista …pero es necesario llegarle a un gran sector de la poblacion que permanece adormecido por el bombardeo mediático oligarquico Hay que insistir en crear Conciencia de pertenencia PATRIA. Ŕecordar constatemente las ATROCIDADES COMETIDAS POR LOS GRINGOS EN EL MUNDO ENTERO(HOY SE CUMPLEN 6 AÑOS DEL VIL ASESINATO DE MOAMMAR GADAFI Y LA DESTRUCCION DE LIBIA)
ameaxxi
May 7, 2019, 10:57 am
Muchas gracias Alirio, oportuno comentario! Abrazo!