La Cámara de Representantes de Estados Unidos sancionó una ley que incluye un llamado al Gobierno del presidente Joseph Biden para investigar si las denuncias nunca probadas de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre fraude  electoral en Bolivia contribuyeron al golpe contra Evo Morales en 2019.

La llamada Ley de Asignaciones de Fondos para Operaciones en el Extranjero, que ahora deberá analizar el Senado, pide al Departamento de Estado que busque respuestas de la OEA respecto de su comportamiento en Bolivia.

El objetivo de este pedido aprobado en la Cámara Baja es «garantizar que no ocurran otra vez ataques similares contra la democracia» como el que ocurrió en Bolivia, con el aval explícito de la OEA que comanda Luis Almagro.

En un comunicado, las autoridades demócratas de la Cámara dijeron que el pedido urge al Departamento de Estado a investigar «las declaraciones y acciones altamente controvertidas de la OEA al denunciar fraude en las elecciones de 2019 en Bolivia».

La nota agregó que estas afirmaciones de la OEA «contribuyeron al derrocamiento del presidente de Bolivia elegido de manera democrática y a la aparición de un régimen no elegido, apoyado por el Ejército y responsable de violaciones masivas a los derechos humanos».

«Pese a repetidas cartas de congresistas, funcionarios de la OEA no han dado respuesta a las preguntas de miembros del Congreso sobre los fundamentos de las afirmaciones de la OEA sobre Bolivia», prosiguió el comunicado.

«Estadísticos de primera línea y medios de comunicación creíbles de todo el mundo han concluido que las declaraciones de la OEA estaban equivocadas y carecían de base factuales», agregó.

Afirmó la nota que «los representantes Jan Schakowsky y Susan Wild (quienes presentaron el pedido formal) seguirán trabajando para garantizar que los miembros del Congreso reciban información creíble (…) sobre el daño causado a las instituciones democráticas de Bolivia».

El pedido al nuevo Gobierno demócrata de Estados Unidos de investigar a la OEA (e implícitamente a Almagro) eleva la presión a Biden para que atienda este tema, uno de los más graves ocurridos en América Latina en lo que va del siglo.

Argentina, México, el nuevo Gobierno de Bolivia, junto a organizaciones políticas y sociales han denunciado la complicidad de Almagro en el golpe en Bolivia y piden la renuncia de su secretario general.

En 2019, un informe nunca probado por la OEA intentó legitimar el golpe de Estado contra Morales  y generar incertidumbre internacional sobre las supuestas irregularidades mencionadas por Almagro.

En aquel momento la OEA emitió un informe sobre los comicios del 20 de octubre en el que denunció tácticas «deliberadas» y «maliciosas» para inclinar las elecciones hacia Morales, pero análisis independientes rechazaron las afirmaciones y desestimaron el análisis estadístico sobre el que se basaban.

La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)

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