La Justicia brasileña suspendió de manera cautelar parte del decreto firmado por el presidente no electo, Michel Temer, que autoriza el proceso de privatización de la eléctrica estatal Eletrobras, la mayor empresa de energía del país.

La decisión, tomada por la Justicia Federal de Pernambuco en primera instancia, paraliza un artículo del decreto que permite la inclusión de Eletrobras y sus subsidiarias en el Plan Nacional de Desestatización lanzado por el Gobierno brasileño.

El juez Cláudio Kitner cuestionó el uso de un decreto como «instrumento hábil» para incluir al grupo estatal y a sus filiales (Furnas, Compañía Hidroeléctrica de San Francisco, Eletronorte, Eletrosul y Compañía de Generación Térmica de Energía Eléctrica) en el plan de privatizaciones.

«Nada fue apuntado por el jefe del Poder Ejecutivo (Temer) para justificar la urgencia en la adopción de un decreto (…) que altera de forma sustancial la configuración del sector eléctrico nacional, sin la imprescindible participación del Poder Legislativo», señala la resolución.

La venta del control de Eletrobras, que gestiona la generación, transmisión y distribución de electricidad en Brasil, fue anunciada a mediados del año pasado junto con otras empresas púbicas.

Para el magistrado, Temer utilizó un «artificio» para «concretar su política pública, si no lesa directamente el patrimonio, (…) tropieza de forma violenta con el principio de moralidad, tutelado por la acción popular».