María de Guadalupe Rodrigo, nacida en la ciudad argentina de San Luis, llegó como misionera cristiana a la ciudad siria de Alepo -otrora corazón económico del país- en 2011 y vivió cuatro años de guerra contra la población.

En un testimonio esclarecedor, la monja cuenta cómo era la vida en Alepo antes del estallido de la guerra, por qué fue un ataque planificado desde el exterior y dejó en evidencia la vergonzosa campaña de los medios al respecto. “Las grandes cadenas internacionales siempre mintieron” y lo siguen haciendo “descaradamente hasta hoy”, afirmó.

Guadalupe Rodrigo estuvo casi 20 años como misionera en Medio Oriente, primero en Palestina y sus últimos cuatro años en Alepo. “Podemos testimoniar, por haber vivido antes de la guerra y conocer a ese pueblo, que lo que está sucediendo en Siria está muy lejos de ser una guerra civil. Si hubiera que ponerle una etiqueta sería más bien una invasión”, explicó quien vivió desde adentro el ataque al país.

Sobre la liberación del este de Alepo, aseguró: “Lo que muestra la prensa internacional es el Ejército supuestamente masacrando a los civiles”, cuando en realidad debería exhibir “a los habitantes que salen con alegría a encontrarse con los soldados que los están liberando”, afirmó. Recordó también que “estos civiles estaban siendo usados como escudos humanos por los rebeldes”.