Sheinbaum será candidata del oficialismo en México
La ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum fue proclamada como candidata del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) para las elecciones presidenciales de 2024.
La postulante del oficialismo se medirá con Xóchitl Gálvez, candidata de la oposición unificada, por lo que por primera vez en su historia México tendrá una mujer al frente del Poder Ejecutivo.
Sheinbaum se impuso en un sistema de encuestas -utilizado por oficialismo y oposición por primera vez en la historia electoral mexicana- y aventajó a tres dirigentes de su partido y otros dos de fuerzas aliadas, todos varones.
La proclamación fue cuestionada por su principal competidor, el excanciller Marcelo Ebrard, quien reclamó que se repitiera la encuesta debido a que tenía “evidencias” de irregularidades.
La exgobernadora de la capital obtuvo entre 36,6% y 41,1% en los cinco sondeos, cuyos resultados fueron informados por separado.
Sheinbaum fue seguida por Ebrard, con entre 25,0% y 26,4%. Más atrás se ubicaron el exsecretario de Gobernación Adán López, el senador Gerardo Fernández Noroña, el exgobernador Manuel Velasco y el senador Ricardo Monreal.
El presidente Andrés López Obrador aclaró no haber “inclinado la balanza” a favor de ningún aspirante, y descartó que vaya a producirse una ruptura en Morena.
El duelo entre Sheinbaum y Gálvez implica que México será gobernado desde diciembre del próximo año por una mujer por primera vez desde su independencia en 1821.
Nieta de abuelos judíos provenientes de Bulgaria y Lituania, Sheinbaum exhibe un talante reservado y prudente, sin carisma, según sus adversarios.
“Soy hija del 68”, dice la exalcaldesa, quien reivindica la herencia de las luchas sociales y no haber pertenecido jamás al PRI, el viejo partido hegemónico durante 70 años en el siglo XX.
Procedente de la burguesía intelectual capitalina, Sheinbaum promete continuar las políticas de López Obrador, limitado a un único mandato de seis años, según la Constitución.
En nombre de Morena, afirma que defenderá a los más pobres y a las comunidades indígenas, y celebra los buenos resultados macroeconómicos del actual gobierno, tales como la fortaleza del peso mexicano.