Una nueva huelga de mujeres y una multitudinaria marcha por las calles de Buenos Aires y de diferentes ciudades de Argentina se realizó este miércoles contra la «justicia patriarcal» y en repudio a la decisión de un tribunal de absolver a dos acusados de femicidio y abuso sexual de Lucía Pérez.

El paro y la movilización se decidió el lunes en diferentes asambleas feministas en las que acordaron marchar para repudiar el fallo en el caso de Lucía Pérez que absolvió a Matías Farías, de 25 años, y a Juan Pablo Offidani, de 43, de los cargos más graves por la muerte de la adolescente de 16 años.

Las organizadoras de esta protesta denunciaron que el fallo «condena a la víctima por sus libertades e intenta disciplinar al colectivo de mujeres, lesbianas, trans y travestis por nuestras autonomía».

Los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de la ciudad de Mar del Plata, integrado por Juan Facundo Gómez Urso, Aldo Carnevale y Pablo Viñas, dijeron que no pudieron probar la responsabilidad de los imputados en la violación y aberrante muerte de Lucía.

En la ciudad de Buenos Aires, la movilización con muchas de las manifestantes vestidas de negro, comenzó en los Tribunales porteños con el  «símbolo de la (in) justicia»,  y marchó hacia la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno.

Un grupo de mujeres realizó una ronda en la que cantaron y gritaron: «abajo el patriarcado que va a caer, arriba el feminismo que va a vencer» en la zona del obelisco de Buenos Aires, a unas cuadras de Plaza de Mayo.

Las organizadoras estimaron que hubo marchas en unas 30 ciudades del país, desde el norte argentino hasta la Patagonia, en todos los casos bajo las mismas consignas.

El primer paro de mujeres en Argentina se realizó el 19 de octubre de 2016 tras conocerse la muerte de Lucía Pérez, dos años después al conocerse el fallo, estalló la ira entre las mujeres y muchos hombres, a punto tal que se promueve un juicio político contra los tres jueces del caso.