Planes quinquenales, ejes del proceso del MAS en Bolivia
Más allá de los asuntos de coyuntura, el período político, económico y social que se inició en 2006 con Evo Morales, primero, y Luis Arce, después, responde a una acción planificada.
Esa predeterminación de los objetivos se plasma en programas que, cada cinco años, se renuevan, actualizan y profundizan, en acuerdo con las organizaciones sociales, políticas y sindicales que son parte del debate.
De esa matriz nació el Plan de Desarrollo Económico y Social (PDES) 2021-2025, que acaba de aprobar la Cámara de Diputados de la Asamblea Plurinacional y que ahora debatirá la Cámara de Senadores.
El plan quinquenal aprobado en Diputados es sucesor del establecido para el período 2016–2020, interrumpido por la dictadura que derrocó a Evo en noviembre de 2019.
Hubo otros dos planes de desarrollo, para los primeros diez años de Gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS), entre 2006 y 2016.
La nueva versión del PDES lleva por lema “Reconstruyendo la economía para vivir bien, hacia la industrialización con sustitución de importaciones” y pone en agenda, además, las inversiones necesarias para avanzar en la transformación de la matriz energética del país.
Cada Plan de Desarrollo establece objetivos que, al finalizar el período, son revisados en su cumplimiento, actualizados o reforzados.
Allí aparecen temas como soberanía energética, lucha contra la pobreza, crecimiento social, control del Estado en la explotación de sus recursos naturales, industrialización, desarrollo nuclear, relaciones internacionales con soberanía, cultura de la descolonización y despatriarcalización, reforma judicial y transparencia del Estado.
Vigencia de la Agenda Patriótica
En 2012 se estableció un Plan Madre que incluye a todos los demás programas quinquenales: la Agenda Patriótica 2025, nacido de un largo y tenso debate en el que hubo no pocos desgastes políticos hacia adentro del MAS.
Esta Agenda Patriótica promueve, en 13 ejes o pilares, la “participación en la Construcción de la Bolivia Digna y Soberana con Autonomías”.
1.- Erradicación de la pobreza extrema.
2.- Socialización y universalización de los servicios básicos con soberanía para Vivir Bien.
3.- Salud, educación y deporte para la formación de un ser humano integral.
4.- Soberanía científica y tecnológica con identidad propia.
5.- Soberanía comunitaria financiera sin servilismo al capitalismo financiero.
6.- Soberanía productiva con diversificación y desarrollo integral sin la dictadura del mercado capitalista.
7.- Soberanía sobre nuestros recursos naturales con nacionalización, industrialización y comercialización en armonía y equilibrio con la Madre Tierra.
8.- Soberanía alimentaria a través de la construcción del saber alimentarse para Vivir Bien.
9.- soberanía ambiental con desarrollo integral, respetando los derechos de la Madre Tierra.
10.- Integración complementaria de los pueblos con soberanía.
11.- Soberanía y transparencia en la gestión pública bajo los principios de no robar, no mentir y no ser flojo.
12.- Disfrute y felicidad plena de nuestras fiestas, de nuestra música, nuestros ríos, nuestra selva, nuestras montañas, nuestros nevados, de nuestro aire limpio, de nuestros sueños.
13.- Reencuentro soberano con nuestra alegría, felicidad, prosperidad y nuestro mar.
Así entonces, cada PDES, coordinado por el Ministerio de Planificación del Desarrollo, está construido metodológicamente por metas correspondientes a cada Pilar de la Agenda Patriótica.
El horizonte fundamental –no como lema sino como objetivo- en el Buen Vivir o Vivir Bien. El Gobierno y las organizaciones indígenas y campesinas revalorizan el Vivir Bien como “una forma activa y sin descanso una relación armónica y metabólica entre los seres humanos con la naturaleza».
Es allí -entienden- «donde todos los seres vivos viven en equilibrio y complementariedad con la Madre Tierra, respetando los derechos de las personas, de los pueblos y de la Madre Tierra».
Lo que para ciertos sectores urbanos de Latinoamérica es romanticismo revolucionario, el Buen Vivir es una visión innegociable y altamente fundamentada de los pueblos rurales.
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La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)