El Gobierno de Argentina suspende todos los vuelos aerocomerciales desde Brasil, Chile, México y Reino Unido y anunció fuertes controles en el aeropuerto internacional de Ezeiza, como medida para demorar el posible ingreso masivo de las nuevas cepas de Covid-19.

Las medidas entran en vigencia desde el sábado e incluye la decisión de que los argentinos que estén en tránsito y entren al país, deberán pagar su testeo en el aeropuerto y, en caso de ser positivos, correr con los gatos del  aislamiento donde decidan las autoridades.

Argentina suspende los vuelos para desalentar el turismo al exterior no solo con vistas al fin de semana largo de Semana Santa sino para los próximos meses.

También busca extremar medidas para evitar o retrasar la llegada al país de las peligrosas variantes conocidas como Manaos, Río de Janeiro y Reino Unido.

Si bien esta semana fueron detectados casos con las nuevas cepas en algunos viajeros, las autoridades aseguran que el país no transita aún el status de “circulación comunitaria”.

De manera paralela, en el país se registra un aumento de casos de SarsCov-2, en lo que las autoridades interpretan como una segura segunda ola de casos.

Con Brasil superando los 300.000 muertos por coronavirus, la pandemia aumenta la preocupación de los países del cono sur, muchos de los cuales ya han dispuesto nuevas medidas de confinamiento para frenar los contagios.

Todos los países limítrofes con la Argentina, con excepción de Bolivia, donde la situación no es extrema, viven con preocupación tanto el aumento de casos como el colapso sanitario: Brasil, Paraguay, Uruguay y Chile.

La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)