Terceros Lara, el militar golpista que agradeció a Macri
12 julio, 2021
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Por Adrián Fernández
El general Jorge Gonzalo Terceros Lara, jefe de la Fuerza Aérea de Bolivia en los días del golpe de Estado contra Evo Morales, en noviembre de 2019, es una de las piezas clave de la rama militar del golpismo y de los nexos con los políticos de la derecha y con los gobiernos de Argentina, Brasil, Ecuador y Estados Unidos.
Fue detenido esta semana junto al excomandante de la Armada de Bolivia, el almirante Gonzalo Jarjuri Rada, en cumplimiento de órdenes de la Fiscalía de La Paz.
Ambos militares formaron parte de la conducción castrense que pidió la renuncia de Evo, como concreción del Golpe, junto al excomandante de las Fuerzas Armadas Williams Kaliman, actualmente prófugo de la justicia.
Con las detenciones de Terceros Lara y de Rada, son cinco los militares de alto rango apresados en el marco de la investigación del golpe de Estado contra Morales.
Terceros Lara trascendió las fronteras periodísticas este jueves cuando se hizo pública la carta de agradecimiento al Gobierno argentino del entonces presidente Mauricio Macri por el envío de pertrechos usados para la represión.
«Es muy probable que ese material argentino (que agradeció el militar a través de la embajada en La Paz) se haya utilizado en las masacres de Senkata y Sacaba en nuestro país”, dijo el viceministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Freddy Mamani.
En la carta de agradecimiento, enviada por Terceros Lara tres días después del golpe al entonces embajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez García, detalla la recepción de cartuchos militares y agentes químicos, material utilizado por las fuerzas de seguridad policiales y el ejército de Argentina.
La causa por la que está detenido Terceros Lara -su participación en el golpe de estado- y esta carta de agradecimiento son dos de las varias pruebas de la insubordinación de las Fuerzas Armadas para concretar el golpe de Estado de 2019.
La nota demuestra también que la ruptura del orden constitucional fue planificada antes del 10 de noviembre de 2019, cuando se pidió la renuncia del entonces presidente Evo Morales.
Hay algo más que involucra a Terceros Lara en el operativo que derrocó a Evo: la entidad castrense coordinó sus acciones con actores políticos que no tenían ningún tipo de mando o atribución constitucional.
En estos días se conoció un video del expresidente Jorge Quiroga, difundido en las redes sociales, donde afirma que él coordinaba con la Fuerza Aérea Boliviana.
Esta coordinación quedó en evidencia cuando Terceros Lara, como comandante de la Fuerza Aérea, demoró la salida del avión mexicano que sacaría a Evo, a García Linera y a un grupo de personas más, de Bolivia rumbo al exilio.
Quiroga reveló sobre “el permiso para el avión mexicano» que «el avión mexicano estaba en Perú, no ingresaba, yo hablo con la gente de la Fuerza Aérea, les digo que den el permiso para pacificar el país”.
La instrucción brindada por Quiroga a los militares se produjo cuando la Fuerza Aérea, a cargo de Terceros Lara, impedía el aterrizaje de la aeronave mexicana en momentos en que la vida de Evo corría peligro.
Se sabe también que los pilotos de la aeronave presidencial se negaron a transportar a Morales por orden de Terceros Lara y lo trasladaron contra su voluntad a la Base Militar de Chimoré.
De manera paralela, la Policía, al mando del coronel Ariel Tórrez, inició un operativo para la aprehensión del presidente Morales por instrucción del comandante Vladimir Yuri Calderón, según datos recopilados por la agencia Boliviana de Información, ABI.
Por esas mismas horas, grupos civiles armados, de manera selectiva y planificada, asaltaban casas de autoridades, torturaban y coaccionaban para lograr que el Gobierno renuncie y consumar el golpe.
En su confirmación, el expresidente Quiroga intentó mostrarse como un republicano que intentaba pacificar al país con la salida de Evo. Sin embargo, luego reconoció: «no voy a negar que el hecho de que (Morales) suba al avión mexicano, vaya al asilo, significaba dejación del cargo, abandono de funciones y efectivizaba la sucesión constitucional”, eufemismo con el que la derecha denominó al golpe.
Quiroga mostró a los asistentes al seminario donde hizo estas revelaciones, un documento de la Fuerza Aérea Boliviana en el cual se autorizaba las operaciones del avión mexicano. “Es el permiso del avión mexicano, ahí lo pueden ver”, dijo a su auditorio.
Además de esto, la exministra Teresa Morales reveló que fue testigo de una de las llamadas que hizo el expresidente Quiroga al jefe de la Fuerza Aérea, Terceros Lara.
“Tuto (Quiroga) habla con el comandante de la Fuerza Aérea y le instruye que emita la autorización de despegue de la nave donde se encontraba Evo Morales», dijo.
En su declaración, la exministra agregó que «el comandante consultó sobre si debe despegar sólo Evo Morales o también sus acompañantes que eran Álvaro García Linera y Gabriela Montaño, a lo que Tuto Quiroga le dijo: ‘no… no hay problema los tres están autorizados”.
En el momento del golpe, Tuto Quiroga le daba instrucciones al comandante de la Fuerza Aérea del Estado sin ser diputado ni ministro ni autoridad de ningún tipo. Eso sí, contaba con el consentimiento de otros derechistas como Carlos Mesa, Samuel Doria Medina, Rolando Villena y Jerjes Justiniano”, la pata política del golpe.
Evo Morales señaló recientemente a través de la red social Twitter que Terceros Lara habló con él y con García Linera en los días del golpe y pidió que, ahora que está detenido, informe a la población sobre cuántas veces y de qué habló con Tuto Quiroga y la embajada de Estados Unidos”.
“Si quisiéramos analizar y estudiar tanto el documento de la Conferencia Episcopal Boliviana y ahora declaraciones del general Terceros, excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana, pues ellos, en otras palabras, son confesos golpistas, intentan desviar, pero no lo pueden hacer y eso sabe el pueblo boliviano”, señaló Evo.
Terceros Lara es una pieza clave en el ámbito militar en la investigación de los golpistas, como lo es el prófugo Kalima.
Las pruebas, indicios y/o sospechas recogidos hasta ahora señalan además que el comandante de la Fuerza Aérea era nexo con la pata política golpista boliviana y con funcionarios de los gobiernos de derecha de Argentina y de Ecuador, de Brasil y de Estados Unidos.
Los otros sectores que participaron del golpe contra Evo y García Linera fueron la policía y los civiles fascistas que comandaban las fuerzas de choque y amedrentamiento contra funcionarios del gobierno constitucional. El abanico de responsabilidades es bien amplio y las patas del golpe -ahora se confirma- trascienden las fronteras del país.
La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)
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