Triunfo popular tras el cierre definitivo de Pascua Lama
Por Adrián Fernández
Se impuso la presión social en una lucha desigual, que se extendió durante casi veinte años, contra la multinacional extractiva de oro más grande del mundo. La Corte Suprema de Chile ratificó el cierre definitivo del megaproyecto minero Pascua Lama, que la canadiense Barrick Gold había comenzado a desarrollar en 2006 en territorio chileno y argentino.
El fallo emitido por la Tercera Sala del máximo tribunal de Justicia de Chile mantuvo las duras sanciones impuestas por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) que, en enero 2018, ordenó su cierre definitivo, durante el gobierno de Michelle Bachelet.
En la sentencia, la Corte rechazó el recurso de casación presentado por la empresa y confirmó el fallo del Primer Tribunal Ambiental que sancionó al proyecto minero emplazado en la alta cordillera, en la Región de Atacama, por incumplimientos a medidas de mitigación.
La resolución echó por tierra las argumentaciones de la parte demandante, Compañía Minera Nevada SpA, la filial de Barrick que posee la parte chilena del proyecto Pascua-Lama.
El fallo significa el cierre definitivo del megaproyecto cuestionado por organizaciones medioambientalistas de Chile y Argentina por el daño que generaría en el entorno, sobre todo en aguas y glaciares.
La movilización social en ambos países comenzó casi con el inicio de este siglo, luego de que los gobiernos de Argentina y Chile echaran mano a un acuerdo de explotación minera conjunta de 1997, denominado Tratado de Integración y Complementación Minera.
Desde un primer momento se denunció que el método de extracción del oro empleando lixiviación con cianuro abría la posibilidad de contaminación del agua de los glaciares muy próximos a la zona de extracción.
En enero de 2018, la SMA detalló que las sanciones aplicadas a la Barrick surgieron de 33 cargos formulados contra la empresa: 6 por infracciones gravísimas, 14 por infracciones graves y 9 por infracciones leves. “Cinco de los incumplimientos (dos de los cuales produjeron además daño ambiental irreparable) merecen la sanción de clausura total y definitiva”, concluyó.
La SMA de Chile aplicó entonces a Pascua Lama multas por 24 infracciones, que sumadas en Unidades Tributarias Anuales (UTA), equivalían a unos 11,52 millones de dólares. El organismo detalló que, entre otras infracciones graves o gravísimas, se encontraba la intervención de vegas altoandinas y el monitoreo incompleto de glaciares.
También se confirmaron las denuncias sobre afectación de diversas especies de fauna y flora nativa, varias de ellas protegidas por conservación. SMA verificó además la descarga de aguas ácidas al río Estrecho sin cumplir con las normas de calidad del agua, entre otros.
Luego del fallo de enero de 2018, en octubre del mismo año, el tribunal ambiental de Antofagasta también falló a favor del cierre del proyecto, con una resolución ratificada el 17 de septiembre de 2020.
Casi 20 años después del comienzo del proyecto, organizaciones chilenas y argentinas celebraron este fallo de la Corte Suprema, recordaron la larga lucha y valoraron la acción conjunta de la militancia y un sector de la justicia que logró torcer la voluntad y el negocio extractivo a cielo abierto de la principal empresa del mundo. Además, llamaron a las comunidades a estar atentas a controlar el desmantelamiento del proyecto.
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La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)
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