¿De «izquierda» o comunista? – Por Frisco Bay
16 enero, 2019
category: FORO DEBATE
No soy de «izquierda» porque eso es ser cualquier cosa incluso alguien que por su forma de pensar y acciones favorece los intereses de la clase privilegiada. La gente de «izquierda» es anti-comunista porque consideran «extremista» al comunismo sabiendo que el verdadero comunismo busca destruir el capitalismo y no «reformarlo» ni mucho menos integrarse al mismo como los de «izquierda». El termino «izquierda» es políticamente vago, difuso, ambiguo, incierto, inseguro y esconde múltiples rostros, caretas, o mascaras que ocultan lo que realmente esta detrás del discurso; en la «izquierda» no hay verdadera identidad y claridad sino confusión porque aunque el discurso sea anti-capitalista sus acciones no son. La «izquierda» ha demostrado que no son anti-capitalistas sino defensores y promotores del mismo sistema que les facilita condiciones materiales de nivel privilegiado, como es el caso de políticos y partidos de «izquierda» en congresos o parlamentos burgueses. El verdadero comunista busca destruir el capitalismo y reemplazarlo con un sistema que ponga a las personas por encima de todo incluso los negocios. Somos comunistas y no de «izquierda» al identificarnos. La «izquierda» es un camuflaje falso del capitalismo que oculta el oportunismo de quienes solo buscan su propio beneficio por medio del engaño.
Actualmente, la «izquierda» se divide en diferentes ramas ideológicas que tienen en común la «democracia reformista» que es una forma de neoliberalismo que pretende «reinventar» el capitalismo para alejarlo de su caducada y obsoleta naturaleza, e intentar darle un aspecto «renovado» o «humanitario» acercándolo a conceptos de libertades individuales como la ecología, los derechos humanos y otros asuntos de interés social, pero conservando y promoviendo la «economía de mercado» y la «democracia liberal» como eje central de la sociedad para alejarlo de la clase trabajadora y del Marxismo-Leninismo. La «izquierda» promueve una forma «reciclada» del neoliberalismo para salvar y continuar la estructura capitalista, e impedir que las masas conozcan la verdad sobre como realmente funciona el capitalismo que no ofrece ningún futuro más que explotación, desigualdad, injusticia, corrupción, crimen, odio, individualismo, alienación, guerras, racismo, perversión, destrucción y muerte de lo cual se beneficia la oligarquía y sus subordinados peones.
El origen histórico de la «izquierda» es burgués y vinculado a una votación en la Asamblea Constituyente surgida de la revolución francesa en 1789, que discutió la propuesta de un artículo en la nueva constitución. Los diputados jacobinos de «izquierda» representaban a la pequeña burguesía y desde entonces el termino «izquierda» quedo asociado a opiniones sobre «cambios» [reformas] en lo político y lo social. La actual «izquierda democrática reformista» es el tipo de «izquierda» predominante en el surtido de «izquierdas» que existen, siendo la falsa socialdemocracia la mas común y aceptada por su raíz histórica asociada con la contrarrevolución Bolchevique y su rechazo al Marxismo-Leninismo. La gente de «izquierda» evita hablar o reconocer las grandes tragedias humanas causadas por el capitalismo y se limitan a ofrecer «diálogos» que al final no resuelven nada y todo queda igual o peor. Los de «izquierda» no están en el campo de los oprimidos, sino en parlamentos o congresos cobrando sueldos mensuales que un trabajador tendría que trabajar años para lograrlo. Pero lo peor es que los de «izquierda» en parlamentos o congresos burgueses, tienen la desfachatez de decir que son «comunistas» y que su presencia en esos lugares es para «defender intereses populares.» La farsa y el cinismo de los de «izquierda» hacen hervir la sangre y el espíritu insurgente.
Todo lo mencionado con relación a la «izquierda» se puede corroborar observando su condición social y estilo de vida, que ninguna duda deja de que son auténticos enemigos de los oprimidos victimas del capitalismo, mientras dicen falsamente que trabajan en beneficio de los «desfavorecidos» en este sistema compuesto por oligarquías privilegiadas. Por todo esto y más, debemos identificarnos como comunistas y nunca como de «izquierdas» si realmente trabajamos para el interés del pueblo. Los/las de «izquierda» son en realidad mentirosos oportunistas sobre quienes Lenin dijo lo siguiente:
«La burguesía oligarca necesita lacayos en quienes los trabajadores puedan confiar; necesita de quienes pueden pintar con palabras bonitas los colores del reformismo mientras tiran polvo a los ojos del pueblo trabajador, para cegarlos y distraerlos de la verdadera revolución, mientras describen con falsedades la senda del camino reformista. Los socialdemócratas se reducen a lamentos de filisteos cobardes que temen a la verdadera revolución comunista.» — Lenin.
La «izquierda» es en realidad anti-comunista y se nota en su falso discurso que no enfoca en la raíz de los problemas creados por el capitalismo, sino que se limita a minimizar su magnitud con charlatanería y ofertas que en el fondo son falsas y no resuelven nada. La palabra «izquierda» no existe en todo lo que escribieron Marx y Lenin pero si la palabra «comunista.»