Donald Trump abre en Turquía otro frente de conflicto
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció su Gobierno no reconoce al embajador estadounidense en Ankara, John Bass, como representante diplomático de Washington.
«Ese embajador concluye su misión, pero ni yo ni mis ministros lo recibiremos», dijo Erdogan al referirse a la crisis desatada con Estados Unidos por la suspensión de emisión de visados.
Erdogan insistió: «ni nuestros ministros, ni el presidente del Parlamento, ni yo mismo hemos aceptado esas visitas de despedida porque no lo vemos como al representante de Estados Unidos en Turquía».
El presidente turco denunció que “nosotros no empezamos (con la crisis). Es un problema que ha creado Estados Unidos. Ellos no quieren hablar con el Ministerio de Exteriores (turco)”.
Bass confirmó este martes en Twitter que la suspensión de visados fue adoptada por Washington el pasado domingo tras la detención de un empleado turco del consulado en Estambul.
Más temprano el primer ministro turco, Binali Yildirim, pidió a Estados Unidos «que actúe con sentido común» y que revoque la decisión de suspender la emisión de visados en Turquía.
Al hablar en el Parlamento, Yildirim señaló que «intentar castigar a los ciudadanos es una reacción muy poco adecuada para países aliados. Es una reacción nada adecuada para un gran país como Estados Unidos».
Confirmó que su gobierno investiga a empleados de sedes diplomáticas estadounidenses por supuestos vínculos con el predicador islamista turco Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos, acusado de instigar el fallido golpe de Estado de julio de 2016.