Bolsonaro: un guiño al orden interno y otro a los mercados
“Nuestra libertad está en juego, tenemos que lograr que Brasil sea diferente, es difícil, pero si ganamos, lograremos reducir el poder que tiene el Estado, tener solo 15 ministerios”, dijo Jair Bolsonaro en su primer discurso transmitido vía internet tras conocerce los resultados de las elecciones presidenciales de este domingo.
Tras agradecer «a quienes votaron por mí», el candidato de extrema derecha prometió: “reconduciré a Brasil hacia la victoria, si Dios quiere” y reafirmó su lucha para hacer de Brasil “un país diferente”.
“Muchas empresas (del Estado) serán privatizadas o cerradas”, afirmó el vencedor de la primera vuelta de este domingo, con el 46,16%. Otra de sus «promesas» es que su programa económico incluye la liberación de los productores de la presión del Estado.
Luego se refirió a una denuncia sobre el funcionamiento de las urnas electrónicas: “estoy seguro de que si ese problema no hubiera ocurrido y tuviéramos confianza en el voto electrónico, ya tendríamos el nombre del presidente de la República decidido en el día de hoy”.
Bolsonaro, un excapitán del Ejército y defensor de la última dictadura militar en Brasil (1964-1985), avanzó mucho en las intenciones de voto en los últimos días y logró una cosecha de votos muy por encima de la que le asignaban las encuestas, del orden del 32 al 35%.
Partidario de la política del presidente de Estados Unidos, “el Trump brasileño” suele afirmar que los afrodescendientes “no sirven para nada” y prometió relajar las leyes de control de armas de fuego para que cualquier brasileño pueda comprar una.
De hecho, durante la jornada electoral de este domingo los partidarios de Bolsonaro publicaron en las redes sociales fotos y vídeos de armas de fuego dentro de las cabinas de votación.