Fin de semana con asesinatos políticos en Colombia
Amado Torres, tesorero de la Junta de Acción Comunal de la vereda (comunidad) La Miranda, fue asesinado en el municipio de Apartadó, departamento de Antioquia, en horas previas a la llegada del presidente Iván Duque y su creador político, Álvaro Uribe.
La extrema gravedad del hecho estuvo acompañada de otro suceso doloroso para la familia de la víctima: en medio de un fuerte esquema de seguridad por Duque y Uribe, la policía pidió a un hijo de Amado Torres que se encargue de trasladar el cadáver de su padre.
Según testimonios de la familia de Torres, hacia las seis de la mañana del sábado, hombres fuertemente armados y vistiendo prendas militares ingresaron a la vivienda de la víctima y lo sacaron violentamente para posteriormente asesinarlo.
Las mismas fuentes revelaron que la Policía se comprometió a retirar el cadáver pero dos horas después desistió y pidió al hijo de la víctima que se cargue el cuerpo de su padre asesinado. Así sucedió, con ayuda de vecinos y otros familiares de Torres.
Según las primeras evidencias, las balas fueron disparadas a quemarropa desde un fusil. En 2013, el Ejército de Colombia asesinó a uno de los hijos de Torres.
También el sábado se conoció la noticia del asesinato de Didian Erley Agudelo, un líder campesino y ex concejal del municipio de Campamento, departamento de Antioquia. Su cadáver fue hallado en la vereda La Frisolera, cuatro días después de haber sido reportado como desaparecido.
Familiares de la víctima y habitantes de la zona acusan a hombres de la Séptima División del Ejército colombiano por este crimen y ponen como ejemplo que unos 250 campesinos junto a la Fiscalía y la fuerza pública buscaron durante cuatro días y el cadáver no estaba en el sitio en el que luego apareció.
La Séptima División del Ejército emitió un comunicado según el cual abrirá una investigación disciplinaria contra los acusados por estos hechos.