Tras la devastación, Israel firmó un alto al fuego en Gaza
El Gobierno de Israel aceptó un alto al fuego al dar cumplida esta etapa de devastación de instalaciones -la mayoría civiles- en la Franja de Gaza, territorio palestino bajo dominio del estado israelí.
La tregua se dio a instancias de Egipto y tras las voces internacionales que pedían en cese de los bombardeos de Israel en suelo palestino y del lanzamiento de cohetes desde Gaza a territorio israelí
El régimen ultraderechista de Benjamin Netanyahu y el movimiento palestino de resistencia Hamas (que gobierna la Franja de Gaza) acordaron que el alto al fuego entró en vigencia en la noche de este jueves (hora local).
Atrás queda una nueva acción militar de Israel, desproporcionada como todas, desentendida de su rol de potencia ocupante que avanza a diario sobre los territorios palestinos.
Después de 11 días de bombardeos y ataques constantes, el saldo es de 232 muertos en la Franja de Gaza y 12 en Israel y representaron la peor ofensiva militar desde la invasión por aire y tierra de 2014.
Hamas, la fuerza política que controla el Gobierno de Gaza, y la Yihad Islámica, otro partido con brazo armado en ese territorio, confirmaron la tregua que antes había anunciado el régimen israelí.
Aunque el Gobierno israelí destacó que la tregua no conlleva condiciones, Osama Hamdan, miembro del bureau político de Hamas, le dijo al canal de noticias Al Mayadeen que habían recibido «garantías de que la agresión israelí contra la mezquita de Al Aqsa y (el barrio de Jerusalén Este) Sheikh Jarrah se detendrá».
Precisamente, la ofensiva israelí sobre Jerusalén Este, incluyendo la expulsión de palestinos de ese territorio que les pertenece por historia y por mandato de la ONU, fue clave para que se inicie la resistencia de Hamas y la feroz ofensiva israelí.
La tensión comenzó a escalar cuando familias palestinas del barrio Sheikh Jarrah resistieron a las órdenes de desalojo del régimen invasor israelí, en clara acción de provocación para justificar los ataques a Gaza.
la situación se volvió más tensa cuando la policía israelí reprimió a miles de fieles musulmanes que rezaban en la explanada de las mezquitas, uno de los lugares santos del islam, donde está Al Aqsa, durante el mes de Ramadán.
Esto desató una ola de protestas dentro de Israel de la minoría palestina y el inició una serie de lanzamientos diarios de cohetes desde la Franja de Gaza que golpearon parte del sur y centro del país.
La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)
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