«La nueva fase es el gobierno popular en Colombia»
«La movilización popular debe crecer y volverse permanente (…) la fase que sigue es el gobierno popular», dijo el presidente de Colombia, Gustavo Petro, al participar de una multitudinaria movilización de apoyo en momento de una fuerte ofensiva de sectores opositores y de una crisis en su propio gobierno.
En su discurso, en Bogotá, Petro hizo un llamado al Congreso, que entró en el llamado «plan tortuga» para dilatar el tratamiento de los principales proyectos enviados por el gobierno, como las reformas laboral, previsional y de salud.
El mandatario mencionó además que «las reformas ya presentadas crecerán con la reforma al código de minas, para proteger a la pequeña minería, a la ley 30 de educación superior para ampliar cobertura y gratuidad, y a la ley de servicios públicos.para darle prevalencia a los usuarios».
La crisis interna, que repercutió en el Congreso, estalló por desinteligencias con la exjefa de Gabinete, Laura Sarabia, y con el exembajador en Venezuela, Armando Benedetti, luego de la publicación de audios en los que supuestamente Petro da a entender que recibió dinero del narcotráfico durante su campaña electoral.
En este contexto, Petro convocó a movilizaciones a nivel nacional este 7 de junio para darle un respaldo a su Gobierno y a las reformas sociales que están en trámite lento en el Congreso.
«Aquí demostramos que el Gobierno está con el pueblo, que el pueblo quiere las reformas, es un mensaje al pueblo, es un mensaje al Congreso de Colombia, garanticemos los derechos de la gente, no le demos la espalda a la paz», indicó.
En la tarima también estuvo la vicepresidenta Francia Márquez, el recién elegido presidente del Congreso Alexánder López y otras figuras del Pacto Histórico y el Gobierno.
Las centrales obreras fueron unas de las protagonistas de la movilización, pues estas participaron activamente en la construcción de las reformas laboral y pensional.
Organizaciones políticas como la Unión Patriótica también dijeron presente en la protesta con cientos de sus militantes. Otro grupo poblacional que acompañó fue el de las víctimas de la guerra civil que ya lleva más de 60 años.
«Quiero que ustedes, hombres y mujeres, trabajadores y estudiantes, mujeres del pueblo, se sientan gobierno. No soy yo el Gobierno, son ustedes. Yo soy apenas un mandatario de ustedes, un sirviente de ustedes, llego hasta donde ustedes quieran», dijo.
Detalló que «las asambleas populares en todos los municipios» del país tendrán que discutir y tomar decisiones «sobre su región, sobre su territorio, sobre la paz». También tendrán la responsabilidad de velar por «el cumplimiento del programa de gobierno».
El gabinete estará obligado a honrar lo decidido en las asambleas. «Todo ministro o ministra debe obedecer el mandato popular. (Quien) no haga caso, se va», advirtió.
Enfatizó además que su Gobierno «no es de los palacios» ni «de la burocracia» sino que se debe «a la gente sencilla», un «camino» que, afirmó, desea transitar, pues las fuerzas políticas que lo llevaron a la Casa de Nariño ahora son Gobierno.
«¿Qué Colombia queremos? ¿La de los sanguinarios que nos han gobernado? ¿Queremos la Colombia de las fuerzas comunes?», concluyó.
Según Petro, la crisis ha sido aprovechada por la oposición para tejer un entramado de mentiras, en interés de justificar la paralización de las reformas sociales que el país reclama.
También dijo que algunos sectores intentan deponerlo a través de maniobras jurídicas, similares a las que ejecutaron contra al expresidente Pedro Castillo en Perú.
Petro anuncio a los manifestantes que viajará mañana jueves, 8 de junio, a Cuba para el evento de clausura del tercer ciclo de negociaciones con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) con el fin de avanzar en su propósito de poner fin a la guerra en su país.
«Mañana voy a Cuba, voy a firmar un papel que puede significar el comienzo sin retroceso de una era de paz para el país, más difícil que hacer la guerra, es hacer la paz», expresó.
La Policía Nacional informó que todas las manifestaciones que se realizaron este miércoles a favor del Gobierno en Bogotá y otras ciudades principales como Medellín, Barranquilla, Cali, Cúcuta, Bucaramanga e Ibagué, se desarrollaron de forma pacífica.
En esta jornada también se conoció un comunicado de la Internacional Progresista en el que más de 400 diputados, eurodiputados, senadores, alcaldes, expresidentes y líderes sindicales de más de 20 países denunciaron que en Colombia está en marcha un intento de «golpe blando» en contra del presidente Petro.
«Desde la elección del primer gobierno progresista del país, encabezado por el presidente Gustavo Petro, la vicepresidenta Francia Márquez y el Pacto Histórico en el Congreso, los poderes tradicionales de Colombia se han estado organizando para restaurar un orden marcado por la desigualdad extrema, la destrucción del medio ambiente y la violencia patrocinada por el Estado», afirmaron en un comunicado.
Explicaron que, a menos de un año de la toma de posesión, se está desplegando el poder institucional combinado de los organismos reguladores, los conglomerados mediáticos y la rama judicial del país para detener las reformas promovidas por el mandatario, intimidar a sus partidarios, derrocar a sus dirigentes y difamar su imagen en la escena internacional.
La noticia en audio (voz: Salvatrice Sfilio)
Únete a América XXI